El Gobierno y el PP vasco abren una línea directa en materia antiterrorista
Los populares mantienen su acoso a ANV y dicen que Zapatero «no tiene credibilidad» por su actitud pasiva
Actualizado:El PP vasco pidió más información y capacidad de decisión en la política antiterrorista de su partido y ya lo ha conseguido. Mariano Rajoy abrió una línea directa de comunicación de los populares del País Vasco con el Gobierno para que conozcan y compartan la colaboración del partido opositor con el Ejecutivo en la persecución de ETA.
Antonio Basagoiti, presidente del PP vascos y candidato a las elecciones autonómicas, se ha incorporado al selecto cauce de información. Desde que pidió el pasado lunes en Pamplona mayor protagonismo y conocimiento de la política antiterrorista, las cosas han cambiado. Su interlocución con el portavoz de Justicia del PP, Federico Trillo, es continua y se completará con la que mantendrá con la secretaria general del partido, María Dolores Cospedal.
El ministro del Interior también ha hablado con el presidente del PP vasco en los últimos días para explicarle los detalles y motivación de los movimientos de presos que llevó a cabo recientemente Instituciones Penitenciarias, según informaron fuentes 'populares' y del Gobierno.
Uno de los elementos que distorsionaron el mensaje de unidad antiterrorista del PP con el Gobierno fue la airada reacción de Basagoiti la semana pasada al desmarcarse de la concentración de un grupo de presos vascos en las cárceles de Zuera y Villabona, acordada entre el Ejecutivo y la oposición.
Hasta esta semana, sólo Rajoy y Trillo disponían de información de primera mano gracias a su interlocución directa con José Luis Rodríguez Zapatero y Alfredo Pérez Rubalcaba. Fuentes de la dirección del PP aseguran que, en adelante, Cospedal formará parte de ese selecto grupo y será también el contacto con Basagoiti.
«Nuestra posición será más coherente si el PP vasco está presente en ese diálogo», afirmó un destacado miembro de ese partido. Además, la dirección que preside Basagoiti comparte la línea oficial a favor de la unidad de acción con el Gobierno socialista y rechaza la idea, defendida por Esperanza Aguirre, de que se prepara una nueva negociación con ETA.
Asunto distinto es el acoso a ANV, en el que socialistas y populares discrepan sobre el método a aplicar. A medida que refuerza su pacto con Rodríguez Zapatero en la lucha contra ETA, Rajoy le hostiga en el debate político para que disuelva cuanto antes los ayuntamientos gobernados por el partido ilegalizado.
Los populares vascos creen que los socialistas se resisten a actuar con contundencia contra ANV por «cálculo electoral», ante el temor de que esta medida provoque una movilización del electorado nacionalista e incremente el caudal de votos del PNV.
El PP llevó ayer este debate al Senado. Luis Peral, su portavoz de Interior en la Cámara Alta, aseguró que «José Luis Rodríguez Zapatero no tiene credibilidad alguna» en la lucha contra ETA, y se mostró convencido de que el Gobierno se niega a disolver los 42 consistorios controlados por Acción Nacionalista Vasca porque «está pensando más en los intereses electorales de Patxi López que en aplicar la ley».
Peral defendió sin éxito que el Senado reclame al Ejecutivo la disolución inmediata de los consistorios de ANV. El PP se quedó solo.