Los 400 combates del 9

El 23 de septiembre de 1995 Mario Bermejo comenzó a fraguarse su historia en El Sardinero. Con apenas 16 años, el delantero azulino debutaba en Primera División con el Racing de Santander ante el Sevilla en un encuentro que acabó en empate a uno. Este próximo domingo el santanderino jugará ante el Nàstic y cumplirá 400 partidos como futbolista desde aquel debú. Toda una historia de un futbolista que, a sus 30 años, ha pasado por 12 equipos diferentes y ha jugado desde Segunda B a la Copa de la UEFA.

El ariete cántabro hacía balance de su carrera con LA VOZ y comentaba algunas de las imágenes mostradas en este reportaje: «Es un buen recuerdo de cuando llegué a Bilbao siendo juvenil, fue mi primera entrevista como jugador del Athletic». Le enseñamos al 9 del Xerez otra imagen, la suya en el estadio de la Sampdoria tras un encuentro de la Copa de la UEFA: «Fue después de jugar el partido ante la Sampdoria en Génova, que ganamos 1-2, y que conseguimos la clasificación en San Mamés».

Y es que Bermejo ha dado muchos saltos en la vida, algunos que guarda como grandes recuerdos y otros que quisiera olvidar. El de Santander mira sus fotografías de hace ya una década «como una anécdota, algo que contarle a los hijos», pero lo cierto es que no esconde el orgullo por haber pasado por uno de los equipos grandes de España, algo que «no está al alcance de muchos».

Pero no todo fue sobre ruedas en los inicios de Bermejo. El atacante recuerda como su paso del Racing al Athletic fue polémico «porque yo era de Santander, aunque la familia de mi padre es toda vasca, de Bilbao». Pese a estos comienzos, un francés con acento tarifeño apostó por el joven futbolista cántabro en la cantera vasca: «Luis Fernández apostó muy fuerte por mí desde que llegué a Bilbao y siempre le agradeceré todo lo que hizo. Apostó por mí, lo que pasa es que su salida del Athletic también supuso la mía».

Debuta en UEFA

Pero antes el azulino tuvo tiempo para vivir una de las mejores experiencias en su carrera. Fueron sólo 30 minutos, pero Bermejo tuvo la posibilidad de jugar en UEFA con el conjunto bilbaíno en el Luigi Ferraris de Génova, ante la Sampdoria de Verón, Klinsmann, Mihailovic o Montella, «todo un orgullo haber jugado en un campo grande, ante un equipo como la Sampdoria».

De aquel encuentro europeo Bermejo recuerda el férreo marcaje de Mihailovic, «y eso que no soy de quedarme con gente que me ha marcado en un partido, pero por la dureza cuando apenas disfrutaba de jugar en Primera destaco a Mihailovic. Fue media hora aproximadamente y en esos minutos me dio por todos los lados».

Pero a lo largo de estos años Mario también ha guardado un buen paquete de recuerdos positivos. El xerecista reconoce que «me han pasado muchas cosas buenas en estos años, ascensos, el Pichichi en El Ferrol, pero sin duda alguna el día más importante de mi carrera fue el debú con el Racing de Santander con 16 años ante el Sevilla». Un partido en el que coincidió con toda una institución en el fútbol cántabro: «Para mí fue un honor debutar junto a Quique Setién. Fue un sueño hecho realidad porque es un ejemplo a seguir para todos los jugadores de Santander».

400 más

Y ahora llega el partido 400. Le ha tocado en Jerez, un sitio donde al azulino le gustaría estar «muchos partidos más, al máximo nivel. Mi aspiración siempre ha sido la de jugar en lo más alto posible y ojalá que pueda ser con el Xerez en Primera». Esperemos que no tenga que esperar 400 más.

bfernandez@lavozdigital.es