PUERTO REAL

El soterramiento suma un nuevo retraso por culpa del puente de la Degollada

El alcalde de la ciudad confía en que la obra esté para 2011 pese a los múltiples problemas

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El alcalde de la ciudad, José Antonio Barroso, ha mantenido una reunión en Madrid en la Dirección General de Ferrocarriles, para estudiar el proyecto definitivo de la urbanización de los terrenos resultantes del soterramiento del ferrocarril a su paso por la localidad.

«La obra lleva un cierto retraso respecto a la fecha prevista, pero estamos convencidos de que a primeros del 2011 circularán ya con toda seguridad los trenes: hay que tener en cuenta que no es posible que en la Bahía de Cádiz circulen convoyes de cercanías por un trazado ferroviario desdoblado si no se resuelve la obra del soterramiento de Puerto Real, que es ahora el cuello de botella que tiene la zona», señaló Barroso.

La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento puertorrealeño convocaron un concurso para adjudicar la redacción de la ordenación de todo el espacio sobre rasante que se generará en el corredor ferroviario, una vez completada la obra bajo tierra. Barroso apuntó que «en la reunión estuvimos estudiando la forma de encajar los edificios que se construirán en el centro del corredor para acceder al túnel».

El problema que ha surgido es que el puente de la Degollada (que actualmente conecta las dos partes en las que divide la ciudad la red ferroviaria) tiene que ser demolido por completo, pero sin embargo, las pilastras que lo sostienen (que llegan a una profundidad de 15 metros y son de hormigón armado) tienen que permanecer ancladas en su lugar.

«La decisión del Ministerio de Fomento ha sido dejar los pilares enterrados ya que no se pueden eliminar a base de martillo, porque sería un trabajo ímprobo y muy costoso en términos económicos y esfuerzo humano», señaló el alcalde.

Más problemas futuros

Como consecuencia de la permanencia de los pilares del puente, el andén de la futura estación subterránea verá condicionado su tamaño, ya que no podrá prolongarse más allá de donde estén enterrados los pilares. «También hemos estado situando todos los elementos arquitectónicos que van sobre la plataforma rasante, como el edificio que dará acceso a la vía y a la estación subterránea, y aquellos que tienen que ver con el soterramiento en sí, como las vías de evacuación y los pozos para la extracción de agua en caso de inundación», zanjó Barroso.