El número de la esperanza

La administración de loterías Doña Manolita, una de las más importantes de España y que más premios ha repartido, ha facturado hasta el momento más para el Sorteo de Navidad, que se celebra el próximo lunes, que durante el año pasado, y a pesar de la crisis económica, según informaron fuentes de esta administración.

Al aumento de estas ventas ha contribuido el hecho de que fue esta administración madrileña quien repartió en el sorteo del año pasado parte del Gordo de Navidad, el 6.381, y además, repartió un quinto premio.

En este sentido, fuentes de Doña Manolita declararon que suele darse el caso de que cuando una administración reparte uno de los premios importantes, al año siguiente aumenten sus ventas, por lo que podría ser ésta una de las razones de que durante este año hayan sido más las personas que han decidido comprar su décimo en esta administración madrileña.

Menos para empresas

Por otra parte, estas mismas fuentes explicaron que lo que sí que se ha notado ha sido un descenso en los números comprados por las empresas para regalar.

«Las empresas han comprado lo mismo, pero las empresas que compraban números para luego darlos como regalo de empresa, ya no lo hacen», apuntaron desde la empresa que en estos días registra colas en la céntrica calle de Gran Vía a diario.

Asimismo, los números que más se han vendido en esta administración son los acabados en 13, mientras que las terminaciones preferidas por los compradores son el 5, el 7 y el 9, además del 8, un número que tradicionalmente no era de los más vendidos y que este año ha superado a todos.

Esta administración de loterías es la más importante de España, con fama dentro y fuera del país debido a la gran cantidad de premios repartidos. Se localiza en la madrileña Gran Vía, 31, donde la originaria vendedora doña Manolita -de quien han tomado el nombre- se instaló en 1931.

Y es que un negocio de lotería es negocio seguro, ya que según datos recientes, el ciudadano español se gasta 674 euros de media al año en el juego. De este gasto, las administraciones públicas recaudaron más de 2.000 millones en 2007.