"Camarón fue un filósofo de la vida", según Alfonso Rodríguez, autor de la primera biografía oficial del cantaor
Cádiz Actualizado: GuardarEl periodista y escritor Alfonso Rodríguez, co-autor con Dolores Montoya, 'La Chispa', de la primera biografía autorizada de Camarón de la Isla, señaló que el cantaor de San Fernando (Cádiz) fue "un filósofo de la vida, un artista que vivía la música y que se olvidaba de todo cuando se bajaba del escenario para entregarse a su prioridad, la familia".
En declaraciones a Europa Press, el autor de 'La chispa de Camarón' (editorial Espasa) explicó que había muchos datos que a 'La Chispa' se le perdían porque la información que ella tenía era la de las conversaciones con su marido. "Se le perdían fechas, años, dónde estuvo o cómo fue esto o aquello", según explicó Rodríguez, quien precisó que, "si en un principio la idea era que 'La Chispa' narrara la historia de principio a fin", luego le pareció "más honesto que los momentos históricos en los que ella no estuvo los contara alguien próximo a Camarón y en primera persona".
Por ello, le dio voz en la biografía, en la que se incluyen fotos del álbum familiar, "a gente que estuvo con el cantaor", de modo que tienen cabida, entre otros, Isabel y Remedios Monge, Raimundo Amador, Kiko Veveno, Lolita Flores, Blanca del Rey o Pansequito, una figura "muy importante" en la vida de Camarón, según remarcó Rodríguez, "porque fue quien se lo llevó a Madrid".
"Hay muchos satélites 'camaronianos' a los que acudí porque me pareció más honesto y fiel que hablara la gente que estuvo con él que ponerlo todo en boca de 'La Chispa", según estimó el periodista y escritor, quien señaló además que, de esta manera, se aseguraba también "que no hubiera margen de error".
Por otra parte, Rodríguez recordó que, "aunque del Camarón artista hay muchas visiones publicadas", de la figura de José Monge Cruz no había nada contado, "porque su familia siempre se negó, salvo alguna entrevista corta o declaración suelta de sus hermanos Manuel e Isabel en el cementerio". Para su biógrafo, Camarón fue "un filósofo de la vida y un vividor en el sentido más limpio de la palabra".
"El sabía vivir y priorizó en su vida a su mujer y sus hijos, olvidándose de otros proyectos que le habrían dado a ganar más dinero", según resaltó el biógrafo, quien añadió que "Camarón vivió como quiso y antepuso siempre a su familia", al punto de que, ante esto, "le daba igual exactamente todo, tanto que le llamara Mick Jagger para cantar o que le dieran La Llave del Cante".
En este sentido, destacó que José "cantaba, le pagaban y vivía, sin importarle los premios", según subrayó Rodríguez, quien definió al cantaor "como un filósofo del pueblo". Asimismo, resaltó que fue "un hombre entregado a la música, porque la vivía, que en el escenario fue el más grande y se comportaba como tal". Con todo, incidió en que, cuando se bajaba de él, se olvidaba de su faceta de artista para entregarse a su familia. "En su estudio de grabación creaba y escuchaba desde música árabe a rock", resaltó.
"Yo soy de San Fernando, del mismo barrio que José, y en mi casa Camarón sigue siendo para mis mayores, algunos con 96 años, el chiquillo de Juana", según indicó Alfonso Rodríguez, quien cubrió el entierro del artista y recordó que, aunque tuvo "muchas oportunidades de entrevistarlo", no lo hizo "porque no hacía falta hacerlo para que comunicara"; con su comportamiento ya lo hacía", estimó.