El FMI recomienda flexibilizar el alquiler para frenar la crisis
El organismo internacional aumenta las previsiones negativas para la economía española, con una contracción del 1%
Actualizado: GuardarEl Fondo Monetario Internacional revisó ayer con pesimismo las perspectivas económicas para España, donde la economía se contraerá un 1% en 2009. Para amortiguar la crisis inmobiliaria recomienda flexibilizar los alquileres y para recuperar competitividad, duras reformas estructurales.
Apenas en octubre pasado, el FMI había pronosticado una contracción del PIB del 0.7%, un mal dato que ayer aumentó hasta el 1 por ciento. El informe aplaude la rápida reacción de las autoridades españolas y saluda el buen estado de la banca «gracias a una regulación prudente, una supervisión sensata y a la fuerte tradición del modelo de banca comercial», en lugar de la de inversión que ha precipitado la crisis económica en Estados Unidos. Con todo, el FMI advierte de que si el gobierno español no emprende una serie de reformas estructurales pensadas para el medio y largo plazo se encontrará con un alto desempleo y una larga ralentización económica «de la que será difícil volver a reducir el déficit público», sentencia.
El organismo multinacional advierte que el ajuste del mercado inmobiliario «llevará tiempo», y aunque los permisos de construcción y las nuevas viviendas han caído rápidamente, «seguirán llegando viviendas al mercado, lo que aumentará la presión en (la caída de) los precios».
Ésta es la razón por la que recomienda al Gobierno reactivar el mercado de alquileres para absorber las casas vacantes, facilitar la movilidad laboral y permitir que las familias que más sufran la crisis puedan encontrar viviendas a precio asequible.
«Los períodos iniciales para alquilar, que actualmente están en cinco años, deben ser liberalizados», sugiere. «Las mejoras de las regulación que están planeadas para agilizar las disputas de alquileres inmobiliarios son esenciales». En definitiva, incentivar a que los propietarios pongan sus viviendas en alquiler, pero no mediante medidas punitivas sino eliminando el miedo a verse atrapados a largo plazo con un inquilino no deseado.
Embargos
Con una tasa de paro que se prevé entre las más altas de Europa para el año que viene y el aumento rampante de los embargos, el FMI sugiere proporcionar ayuda gubernamental a los nuevos parados para que puedan reducir a la mitad el pago de sus hipotecas durante dos años, permitiéndoles así afrontar los pagos y seguir en sus hogares.
Lo que no ve con buenos ojos es la política de construcción de viviendas de protección oficial, que a su juicio sólo sirven para engordar y distorsionar el inventario inmobiliario, además de que «no siempre acaban en las manos para los que estaban pensadas», sostiene. «Es preferible asistir con los alquileres y proporcionar subsidios para la propiedad», recomienda.
En su línea tradicional, culpa a «los altos costos laborales» de la mayor inflación española en comparación a otros países europeos, por lo que recomienda moderación salarial y liberalización del sector.