El Atlético regala el primer puesto ante el Olympique
Aguirre planteó un once conservador
Actualizado: GuardarEl Atlético no terminó primero de grupo, no por la presión del público del Marsella, sino por la falta de ganas y motivación para afrontar un partido que fue insulso y un bálsamo en lo que al ambiente se refiere. Ríos de tinta se habían escrito sobre la hostilidad que recibiría al Atlético en Marsella. Los presagios no eran buenos y la espectacularidad de la escolta del conjunto español, tanto a la llegada al país galo como durante su traslado al hotel y posterior trayecto al campo, corroboraba ese ambiente de comitiva gubernamental. Dos helicópteros, diez coches y 20 furgones de la gendarmería custodiaron la expedición, amén de 1.000 agentes en el Velodrome. Al final, todo quedó en la exhibición de unas camisetas con el lema libérez santos, además de infinidad de bengalas y botes de humo en las gradas.
Por suerte, una vez que el árbitro señaló el inicio del partido lo que primó en el terreno de juego fue el fútbol, ramplón pero fútbol al fin y al cabo. El Marsella, que se jugaba el tercer puesto del grupo que da acceso a la UEFA, empezó más replegado de lo esperado.
Los locales sólo creaban peligro a balón parado. En un córner el central Zubar remató con peligro para la portería de Coupet. El Atlético , como en el día del Sporting y tantos otros, sufría con los centros al área. Era un partido sin mediocentros por ambas partes. La joven promesa gala Ben Arfa era el único que ofrecía criterio al ataque del Olympique.
La segunda mitad comenzó igual, con una gran imprecisión por los dos equipos. Poco a poco, el Atlético se echó hacia atrás y le regaló el esférico al Marsella, que sin hacer casi nada se acercaba a las inmediaciones del área rojiblanca. Aguirre contribuyó a recalcar el mensaje conservador al sustituir al Kun Agüero y Maxi.
Liberación de Santos
Finalmente, un juez español acordó ayer la puesta en libertad bajo fianza de 6.000 euros del seguidor del Olympique de Marsella Santos Mirasierra, condenado por agredir a dos policías el pasado 1 de octubre durante el partido de Liga de Campeones entre el equipo francés y el Atlético en el Calderón. La decisión provocó la suspensión de varias manifestaciones de radicales del OM.