Sociedad

Una empresa californiana ofrecerá en 2011 vuelos espaciales por 95.000 dólares

Los pasajeros podrán viajar en la cabina de mando con un ex piloto de la NASA

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Parece ser que ni siquiera el turismo espacial ha sido capaz de resistirse a los encantos de los vuelos low cost. Y ha entrado de lleno en el negocio de la mano de Xcor Aerospace, una empresa californiana que acaba de anunciar que ofrecerá vuelos orbitales para turistas al increíble precio de 95.000 dólares. O lo que es lo mismo, a menos de la mitad de lo que cuesta hacer el mismo viaje con Virgin Galactic (que cobra a 200.000 dólares el billete), la única compañía que se había atrevido a comercializarlos.

Durante su presentación en sociedad, los ejecutivos de Xcor mostraron el prototipo de su nave Lynx (Lince), un aparato de dos plazas que es mucho más pequeño que su competidor de Virgin, el SpaceShipTwo, con capacidad para siete pasajeros. La nave, actualmente en fase de pruebas, estará plenamente operativa en 2010. Para principios de 2011, apenas unos meses después que sus competidores, Xcor estará en condiciones de realizar sus primeros vuelos comerciales.

El «paquete vacacional» que ofrece esta nueva compañía es muy similar al que Virgin viene ofreciendo a sus clientes desde 2005 y que ya cuenta con más de doscientas reservas. Los pasajeros que viajen a bordo del Lince lo harán en la cabina de mando, como copilotos de Richard Seasrfoss, un coronel retirado de las fuerzas aéreas norteamericanas que realizó tres vuelos con los transbordadores de la NASA antes de dejar el servicio en 1998.

El programa actual contempla llegar hasta una altura de algo más de sesenta kilómetros, suficiente para sentir los efectos de la ingravidez pero no para entrar en órbita. El vuelo completo, desde el despegue hasta el aterrizaje, se realizará en unos treinta minutos. Sin embargo, la oferta incluye cinco noches en las lujosas instalaciones de la compañía en Arizona, donde los participantes recibirán la necesaria preparación para el vuelo suborbital y se someterán a diversos test y chequeos médicos.

Un minuto de ingravidez

A su regreso, los pasajeros, que durante el vuelo vestirán trajes espaciales, habrán experimentado la falta de gravedad durante algo más de un minuto. Y por supuesto habrán gozado de unas vistas de la Tierra que hasta ahora muy pocos han podido disfrutar. La cabina del Lince está especialmente diseñada para facilitar la visión a través de sus amplias ventanas.

Xcor espera ser capaz de llevar a cabo cuatro vuelos diarios. La nave, que no necesita de una rampa de lanzamiento, despegará y aterrizará horizontalmente, tal y como hacen los aviones comerciales. La razón por la que Xcor puede ser más barata es el reducido tamaño de la nave, que permite ajustar al máximo sus costes de fabricación.