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Varias personas usan una canoa para salir de su casa en el centro de Blumenau, en el estado de Santa Catalina (Brasil). /Efe
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Las fuertes lluvias dejan ya más de ochenta muertos en Brasil

Hay más de 54.000 desplazados o damnificados y cuantiosos daños en viviendas y obras de infraestructura

AGENCIAS |
RÍO DE JANEIROActualizado:

Las fuertes lluvias que caen desde el viernes en el estado brasileño de Santa Catarina han dejado hasta el momento al menos 84 muertos, más de 54.000 damnificados y cuantiosos daños en viviendas y obras de infraestructura, según el último balance hecho por la Defensa Civil.

A las inundaciones y los deslizamientos de tierra, hay que añadir que 18 carreteras están bloqueadas a causa de las lluvias y que se ha interrumpido el funcionamiento de un tramo del gasoducto que transporta gas boliviano hasta el sur de Brasil. Este temporal que está afectando a casi 1,5 millones de personas y ha dejado sin energía eléctrica a millares de ciudadanos, ha golpeado especialmente el norte de Santa Catarina y la región del Valle de Itajaí, y los meteorólogos pronostican que las lluvias proseguirán durante por lo menos tres días más.

"Casi todas las muertes fueron causadas por deslizamientos de tierras que han dejado enterradas a las personas en sus propias casas", ha afirmado el gobernador de Santa Catarina, Luiz Henrique da Silveira. El gobernador, que daclaró el sábado la situación de emergencia, ha considerado además de "grave" la ruptura del gasoducto de Petrobras que lleva gas de Bolivia hasta el sur de Brasil. La rotura de la tubería ha provocado un incendio y ha obligado a la petrolera brasileña Petrobras a cerrar los registros e interrumpir por un tiempo indeterminado el abastecimiento de gas en el sur de Santa Catarina y en todo el estado de Río Grande do Sul.

Las ciudades donde se ha registrado un mayor número de muertos son Ilhota, con quince víctimas, Blumenau (13) y Gaspar (10), según la Defensa Civil. El alcalde de Blumenau, Joao Paulo Kleinubing, decretó el domingo estado de calamidad pública después de que las aguas del río Itajaí-Açu avanzaran cerca de 11,5 metros desde su margen e inundaran gran parte del centro de la ciudad. Parte de Joinville, otra ciudad afectada, también quedó cubierta por las aguas y al menos 2.000 personas tuvieron que abandonar sus viviendas.

Comunidades aisladas

Los deslizamientos en las carreteras, 18 de ellas están bloquedadas, han dejado totalmente aisladas por tierra las ciudades de Río dos Cedros, Pomerode, Itapoá y Benedito Novo. Mientras que el suministro eléctrico no llega a 160.000 de los 2,2 millones de clientes, que viven principalmente en Blumenau.

Según el Instituto Nacional de Meteorología, en los 24 días de noviembre han caído sobre Florianópolis, la capital regional, 535,8 milímetros de agua por metro cuadrado, volumen cuatro veces superior al promedio para el mes. Las autoridades regionales pidieron ayuda al Gobierno nacional, pero éste no ha anunciado cómo socorrerá a los catarinenses.

La Defensa Civil regional ha solicitado el envío urgente de 12.000 colchones, 12.000 cobijas, 12.000 conjuntos con equipos de limpieza y 10.000 canastas básicas de alimentos. "Nuestras mayores dificultades ahora son de acceso debido a que hay varias comunidades aisladas, cercadas de agua. Solo podemos llegar por aire y las aeronaves tienen dificultades para navegar por causa del mal tiempo", ha dicho el gerente de la Defensa Civil regional, Emerson Nery.