El Elche tumba al Salamanca

El Elche logró la primera victoria de la temporada como local al imponerse al Salamanca por 3-1, y con ello, tras la derrota del Eibar en Zaragoza, sale de los puestos de descenso después de trece jornadas.

El Elche, con el triunfo en este partido, en el que ambos equipos acabaron con un jugador menos por las expulsiones de Samuel y Bustos, encadena siete partidos sin perder.

Los ilicitanos salieron con el acelerador a fondo en busca del partido y la primera victoria como local y, cuando todavía no se habían cumplido dos minutos, Acciari, en un error de despeje de la defensa visitante, remató ajustado al poste derecho de la meta de Alberto, que no hubiera podido evitar el gol. El arranque de la segunda mitad fue como el inicio del encuentro, con una ocasión clara para el Elche, en la que Dani no acertó a rematar bajo palos un balón que había puesto Fernando Niño. El delantero pidió penalti por derribo de Alberto.

El Salamanca adelantó líneas con la entrada de Isaac, lo que contribuyó a que Quique Martín jugara por dentro y metiera el último pase para que su equipo se plantase en el área local con peligro. Isaac y Azkorra tuvieron dos ocasiones para romper la igualada inicial, ante una defensa que jugaba con fuego, mientras que Bolado, en una llegada ilicitana, desaprovechó una oportunidad inmejorable para marcar, pero disparó cruzado ante la salida de Alberto.

El Elche, con el partido roto, quería pero no podía, aunque jugaba con más confianza en sus posibilidades hasta que en el minuto 65, Fernando Niño cabeceó en el segundo palo un córner botado por Saúl para adelantar a los ilicitanos, que volvieron a marcar en el 74, por medio de David Fuster, y tras una dejada de tacón de Bolado.

Penalti

Quique Martín acortó diferencias al transformar un penalti que se inventó Pérez Montero después de que Fernando Niño se protegiera la cara a un disparo del propio jugador, ante la sorpresa de propios y extraños.

Los locales todavía tendrían tiempo y arrestos para reponerse al gol charro y a los 90 minutos, Saúl desde casi 30 metros lanzó un zapatazo que se coló por la escuadra de Alberto.