Un Arenal helado

Esta no es la plaza del Arenal que me la han cambiado. Eso es lo que parecen pensar muchos de los jerezanos que estos días toman el solecillo en los bancos forjados o, simplemente, pasean por la zona. No son los Reyes Magos que han llegado y han montado un improvisado campamento junto al General Primo de Rivera. Podemos ver a un lado una zona de ocio para los jóvenes. Al otro una gran carpa cuya finalidad aún desconocen muchos jerezanos.

Un señor que viene con LA VOZ bajo el brazo debería tener idea qué se está haciendo. «No tengo ni idea. Yo diría que se trata de alguna caseta para no sé ¿Quizá el día de la berza jerezana? ¿Irán a dar una degustación?», se cuestiona. Dejamos la duda en el aire. Más adelante una señora va con prisas. «No me puedo parar mucho, voy al colegio a por los niños y es tarde -comenta-. Pues mira, si te digo la verdad, me he dado cuenta de que algo se cuece, pero no sé bien que es», responde. Dejemos a la señora su rumbo.

Unos trabajadores están mirando los bajos de la carpa. Es buena idea acercarnos a ver de qué nos podemos enterar.

De hielo

Un señor con un cuaderno en la mano nos responde. «Se trata de una pista de patinaje para la Navidad», nos informa. Esta sección ya lo había adelantado hace ya algunos meses atrás. Nuestros mandatarios andaban barajando la idea de colocar una pista de patinaje de hielo. Auténtica. También adelantamos que se estaba buscando firmas comerciales que acompañarán esta iniciativa con el fin de no sobrecargar las arcas municipales con gastos extraordinarios. Habrán salido bien las cosas.

Este año, el Arenal estará más helado que nunca si cabe. Cuidado con los batacazos, como nos gusta decir por aquí. Una fina cuchilla rasgando el hielo resbala mucho más que los sucedáneos de otros años. No se olviden que los jerezanos nos hemos criado en secano.