Los vecinos de León Herrero temen que el nuevo 'parking' cause grietas en sus pisos
Aseguran que el suelo es demasiado arcilloso y no soportará la actuación La junta de Gobierno desestimó las alegaciones presentadas por este colectivo
Actualizado: GuardarA pesar de la repulsa y el descontento demostrado en varias ocasiones por los vecinos de la zona, el Ayuntamiento continúa preparando el proyecto para la construcción del aparcamiento subterráneo de la avenida León Herrero. Tal y como explica el presidente de la asociación de El Almendral, Juan Repullo, el temor de los 300 vecinos que recoge la entidad radica en que «la obra afecte a los cimientos de los edificios y tenemos miedo de que aparezcan grietas». Para intentar calmar a los residentes, el Ayuntamiento ya les ha trasmitido su «compromiso para tomar las precauciones necesarias que eviten problemas en este sentido». Incluso colocará muros de hormigón y pantallas para proteger la estructura de las edificaciones durante el tiempo que dure la actuación.
Una medida que no templa los ánimos de los vecinos, ya que aseguran que el suelo de la zona «es muy arcilloso, precisamente por la cercanía de El Barrero de donde salía el material para hacer tejas» comenta el presidente de la entidad vecinal. «Esto significa que no tiene una consistencia suficiente para aguantar una obra de tal calado. Nosotros somos conscientes que se trata de una calle pública y que podemos hacer poco al respecto, pero también sabemos que una vez que comienzan los problemas se escurre el bulto entre las administraciones y a los vecinos les toca padecer las consecuencias», argumentó.
En este sentido, la asociación vecinal ya presentó una alegación en contra del estudio de viabilidad del aparcamiento subterráneo, que finalmente fue desestimada por la junta de gobierno local, de manera que ya no les queda otra que esperar que no haya complicaciones en la futura actuación.
Demasiadas desventajas
Entre los inconvenientes que ven en el proyecto los vecinos también destacan la forma de venta planteada para las plazas de aparcamientos. Se trataría de una concesión administrativa por 75 años con un precio estimado en el anteproyecto de 2.300 euros por metro cuadrado. «Éstas son plazas abiertas, en otras zonas resultan más asequible, unos 1.500 euros por metro cuadrado, y además plazas cerradas lo que permite utilizar el emplazamiento como cuarto trastero», según asegura Juan.
Debido al elevado precio de los estacionamientos, la mayoría de los residentes no se plantean la adquisición de las plazas. De todas formas la intención municipal es que el nuevo parking contemple principalmente aparcamientos de rotación.
Los vecinos han exigido al Ayuntamiento que aunque no tengan capacidad de decisión y se mantenga en contra, haya un contacto directo en cuanto a las novedades del equipamiento al ser el colectivo más afectado por las futuras obras y que no ocurra como «le pasa a Casco Histórico con los temas del tranvía que nunca son invitados a las reuniones».