'D.F.'
Antena 3 aprovechó la otra noche el creciente tirón de Física o química (una calamidad que se veía venir) para estrenar su nuevo producto de ficción, Generación d.F.. La estrategia de estreno era buena. Quizás ha sido lo único bueno de todo cuanto rodea a este producto, que es uno de los más flojos que hemos visto en pantalla desde hace años. Generación d.F. quiere ser una radiografía de la generación nacida después de Franco (d.F.). Para ejecutar tal cosa, una espantosa voz en off guía un relato que la cámara capta a modo de documental «callejero». El estreno no llegó al millón de espectadores, con una cuota del 13%.
Actualizado: GuardarEsta serie tiene un problema de base: está pensada por dos cincuentones -Eduardo Campoy y José Manuel Lorenzo- que se dirigen a una generación más joven para contarles no cómo son ellos, los cincuentones, sino cómo es esa generación siguiente. A partir de aquí, todo el edificio se desmorona por su misma base. El planteamiento ideológico del producto -del que es inevitable hablar, porque productores y guionistas han insistido en él desde su misma presentación- es inequívoco: ellos, los papás, vivieron en un mundo «castrado» (sic) porque no pudieron tener acceso a determinadas referencias culturales pero fueron gente progresista y abierta; por el contrario, los otros, los d.F., que sí han tenido todas esas referencias, resulta que en muchos aspectos son muy conservadores (resic).
Aparte de que habría mucho que hablar sobre la supuesta «castración cultural» en España después de 1968 y aparte también de que cabría discutir la calidad del progresismo de unos y la realidad del conservadurismo de otros, el problema es la incomprensión de un fenómeno de cambio social que se ha producido en todo Occidente al mismo tiempo, es decir, sin relación con Franco. Ni España es el centro del mundo ni la generación progre es el pivote de la Historia Universal. Y si a todo eso le añadimos unos diálogos puestos al servicio de la moraleja de la historia y un rodaje de cámara al hombro, el resultado final es simplemente desastroso. Eso es Generación d.F.