CALLE PORVERA

He sido abducida

No sé muy bien cómo ha ocurrido, ni puedo darles detalles de este sorprendente hecho. Pero puedo informarles de que he sido abducida y que mis secuestradores estelares me han devuelto a nuestro mundo, más concretamente a Jerez, después de un periodo en blanco de dos años en los que ha pasado el tiempo para el resto de la humanidad y no para mí.

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Tal vez ustedes piensen que lo que me ha pasado es que de una vez por todas tanto estrés ha provocado que se me vaya la cabeza, pero la verdad es que después del hecho misterioso que me sucedió ayer he ido atando cabos y estudiando la situación y la única conclusión que me cuadra es la de que debo de haber abandonado nuestro sistema solar sin haberme percatado.

Y si no juzguen: ayer me acerqué a una oficina de la Seguridad Social para entregar unas solicitudes de tarjeta sanitaria porque a mi pareja y a mí nos las habían robado. Llevaba los formularios que hace un par de meses me entregó en esa mismo sitio alguien muy amable.

Pero cuando ayer me tocó el turno, después de guardar cola junto a los que arreglaban papeles de la vida laboral -cosas del inestable mercado del trabajo, iba pensando yo-, el señor del mostrador me miró con cara de pasmo cuando saqué los papeles y me dijo que no sólo las tarjetas ya no se pedían ahí, sino que hacía ¿¿¿DOS AÑOS!!! que esos formularios ya no se entregaban. «Hubo orden de destruirlos todos», me dijo muy convencido y algo cortante pese a que yo blandía ante sus narices los que debieron ser los únicos supervivientes. Me fui anonadada, sin mis tarjetas, con la sensación de que el señor pensó que yo estaba loca y convencida de que o he sido abducida y no me acuerdo o alguien rebuscó en la basura el día que fui por primera vez a la oficina.