La investigación apunta a que una patada en el corazón mató a Álvaro Ussía
Los tres porteros de la discoteca madrileña acusados de asesinar al joven pasan hoy a disposición judicial
Actualizado: GuardarLos tres acusados de la muerte a golpes del joven Álvaro Ussía Caballero, ocurrida en la madrugada del sábado en Madrid, pasarán hoy a disposición judicial tras ser interrogados por la Policía. Se trata de los porteros de discoteca David S. G. y Antonio S. S., ambos de 32 años, y David A. D., de 25, a los que el juez podría imputar un delito de homicidio. Tanto los amigos que acompañaban a la víctima como testigos presenciales declararon que los tres empleados de seguridad del local El Balcón de Rosales participaron en la mortal paliza.
La víctima, el estudiante de 18 años Álvaro Ussía, fue enterrada ayer a las 13.00 horas en el Cementerio de San Justo Pastor de Madrid aproximadamente una hora después de que su cadáver saliera del Instituto Anatómico Forense, donde fue trasladado desde el Hospital Clínico para que le practicaran la autopsia. Todo parece indicar que la muerte fue causada por una fuerte contusión en el pecho que dañó su corazón.
En las puertas del Anatómico Forense, familiares de Álvaro y cerca de una veintena de compañeros del instituto donde estudiaba esperaban, con evidentes muestras de dolor, la salida del coche fúnebre. El joven vivía con su madre, su hermano mayor y su hermana pequeña en un chalé en Aravaca, a las afueras de Madrid, y cursaba segundo de Bachillerato en el centro Monte Tabor, en Pozuelo de Alarcón. Se da la circunstancia de que la familia había perdido al padre hacía menos de dos años.
Con el paso de las horas, parecen aclararse las causas del crimen. Álvaro, su primo y otro amigo se encontraban en la discoteca El Balcón de Rosales hacia las 5.30 horas del sábado cuando uno de ellos tropezó con una chica que resultó ser novia de uno de los porteros. Éstos echaron a los jóvenes a la calle, donde Álvaro se enzarzó verbalmente con uno de los empleados de seguridad. Los otros dos agarraron al primo y al amigo de Álvaro y el tercero comenzó a golpear al joven hasta tirarlo al suelo, donde pudo recibir una patada en el pecho mortal de necesidad. Éste quedó semiconsciente, con las señales vitales débiles. Los servicios de emergencia lograron reanimarle, pero hacia las 7.00 horas, ya en el hospital, falleció de una parada cardiaca.
La Policía Municipal de Madrid había presentado más de 47 denuncias contra El Balcón de Rosales por varias irregularidades, entre ellas permitir la entrada de menores a su interior, venderles alcohol o que la misma sala sólo tenía licencia de café-teatro y no de discoteca, según denunció ayer el PSOE de Madrid.