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SIN PREGUNTAS. Joaquín Morales muestra el burofax que le envió a Francisco Nuchera con el protocolo de intenciones firmado. / JAVIER FERNÁNDEZ
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«Firmado está»

Joaquín Morales rubricó y envió ayer a Francisco Nuchera el precontrato de compra-venta confeccionado por el propio ex consejero del Betis la semana pasada

SALVA GALVÁN
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Joaquín Morales firmó ayer el precontrato o protocolo de intenciones para la compra-venta del Xerez Club Deportivo que el empresario sevillano le había enviado el pasado viernes. Fuera del plazo fijado y con una tremenda polémica de por medio, pero lo normal es que Francisco Nuchera ya tenga en su poder un documento que podría abrir las puertas de unas negociaciones que habían quedado prácticamente cerradas.

La posición actual del nazareno ahora es la de esperar una respuesta de Nuchera. Concretamente, Morales desea que el ex consejero bético le devuelva el documento con su rúbrica y le pide una reunión personal «con carácter inmediato».

El burofax remitido ayer por Luz Costa Inmuebles, S. L. -Joaquín Morales- a la entidad Chapín Sports Managing, S. A. -Francisco Nuchera- decía: «Con carácter simultáneo al envío del presente burofax, se le remite a través de servicio de mensajería documento de precontrato de compraventa de acciones y cesión de derechos de Xerez, CD, SAD, en los términos por Vds. Consignados (única modificación, cambio en fecha de junta general ordinaria fijada para día 19, en lugar de día 15 de diciembre), mostrando mi conformidad con el contenido del mismo, circunstancia que intenté comunicarle el pasado lunes en repetidas ocasiones a través del teléfono móvil que me tiene facilitado. Como podrán comprobar se le envían dos ejemplares firmados en todas sus páginas, agradeciéndoles me remita una de dichas copias, firmada por Vd. De la misma forma le indico que se han realizado todas las actuaciones acordadas con Vd. en nuestra última entrevista, concretamente convocatoria de junta general extraordinaria relativa a la ampliación de capital, y convocatoria de junta general ordinaria para la aprobación de cuentas anuales y ceses y nombramientos en el Consejo de Administración. Aprovecho para manifestarle que desearía mantener una reunión personal con carácter de inmediato, al objeto de tratar de la compraventa de referencia, por lo que le agradecería me indicara a la mayor brevedades día, hora y lugar de la reunión. Sin otro particular, en espera de sus noticias, atentamente».

Joaquín Morales convocó ayer de manera imprevista una rueda de prensa para informar de la firma del precontrato. A las once de la mañana se convocaba a los medios y un par de horas después el nazareno estaba sentado delante de tres cámaras de televisión, varios flashes y muchos micrófonos. El todavía presidente advirtió que no admitiría preguntas antes de empezar un discurso que arrancó afirmando que intentaría «ser breve, pero muy claro e ir al grano. Lo de no admitir preguntas es para no enturbiar y actuar directamente con hechos para que no se vaya la fuerza con las palabras».

El nazareno se retraía en el tiempo para recordar que «el señor Nuchera nos mandó el viernes por la tarde un correo electrónico a nuestro abogado, que yo lo vi el lunes al mediodía. Hoy (por ayer) se lo he mandado firmado para que se vea mi voluntad. Si eso era una pega, ya no la hay. Lo único que se le ha cambiado a ese documento es la palabra Jerez que la han puesto con 'x' en lugar de con 'z', una pequeña confusión. También se ha variado el día, y se ha puesto el 19 en lugar del 15. Si eso era una pega, ya se ha eliminado. No voy a entrar en las palabras de Víctor López absolutamente para nada, porque lo que no quiero es enturbiar más. Quiero dejar súper claro que no es que no quiera vender, es que necesito vender. Esta situación ya me puede. Con mis negocios lo he pasado mal e incluso no he tenido para comer, pero esto me está quitando el sueño, esto me va a causar una enfermedad. A Joaquín Morales ya lo tienen machacado. Yo estoy totalmente hundido porque creo que no me lo merezco. Por eso quiero salir, cuanto antes mejor. Ese documento firmado está».

Era más sencillo

El de Dos Hermanas volvió a reiterar que la situación se podría haber resuelto de una manera mucho más sencilla, pues afirmaba que si le «hubieran llamado el viernes, en lugar de mandármelo, se hubiera firmado igual. Es un documento que nos compromete a lo que nos compromete, que es a poco y a mucho. Si a él le hace falta para ser comprador del Xerez ese documento, firmado está. Lo quiero poner lo más fácil posible para que no se pueda decir que Joaquín Morales no quiere vender. Yo necesito vender, yo lo pierdo todo, pero perdiendo se gana. Con esta presión no puedo ya, ni mi familia, ni la gente que me quiere porque esto es algo inaguantable. Entiendo que estoy de sobra aquí. Lo habré hecho bien, mal o regular pero por lo visto la multitud quiere que yo me vaya, y yo, igual que ellos, quiero irme lo mejor posible y haciendo mis deberes, que no son otros que seguir en el club hasta que haya un comprador y hasta que compre».

Tanto Vicente Moreno como Jesús Mendoza han afirmado públicamente que no serán impedimento alguno para que la venta se produzca. Algo que ha afectado especialmente a Morales. Ayer reconocía que el capitán azulino le había telefoneado: «Me dio un poco de pena cuando ayer me llamó Mendoza. Jesús me dijo: 'Presidente, si yo soy el problema, estoy esta temporada nada más. Renuncio a mi contrato'. Yo creo que Mendoza y Moreno se lo han ganado en el campo. Eso es lo único que se ha firmado, y el único que lo puede firmar es el presidente, que soy yo. Y lo hice porque estaba pactado. No se les ha incrementado ni un euro de lo que tenían a ninguno de los dos. Les hemos puesto un año más a cada uno porque se lo habíamos prometido cuando se querían ir en pretemporada, cuando no se quería quedar nadie en el Xerez».

La comparecencia del máximo accionista xerecista recordaba a otros malos momentos en los que el nazareno también se ha visto obligado a sentarse en esa sala de prensa. La diferencia es que ahora Morales parece no tener más fuerzas, por ello le pide «a todo el mundo que, por favor, nos dejemos de presiones, porque a mí no me tienen que presionar, ni a mi consejo de administración, ni a mis jugadores, que yo el día 19 no quiero ser ni presidente, ni dueño de las acciones ni quiero ser nada. Si el señor Nuchera quiere, él será. En caso contrario, habrá que buscar a quien sea porque mi cuerpo no aguanta más ni un segundo. Esto me da un poco de pena porque yo soy un tío bragado, echado para delante y normalmente le echo garra a las cosas, pero no puedo con esta situación».

Daba la sensación de que se mordía la lengua, pues constantemente, recordaba que no quería valorar las declaraciones del portavoz de Nuchera: «Escuché ayer la cinta del señor Víctor López, pero me guardo mi orgullo por hacerle bien al Xerez. No quiero más comentarios. He dicho lo que creo que tenía que decir, y si había alguna pega para la venta las he despejado todas. Esperemos que llegue el día 10 que será cuando por fin estén legalizadas esas acciones que nunca han estado en condiciones, esa ampliación de capital que llevamos cinco años luchando y gracia a Dios la vamos a tener, la auditoría y se presentarán unos números que, dentro de lo que cabe, son positivos».

En el tramo final de su mensaje, Joaquín acabó con unas palabras muy positivas y con la confianza de que esta temporada podría llegar el sueño de la Primera División, aunque para ello, el nazareno considera que «hay que estar con el equipo, porque por estos asuntos ya está Mendoza comiéndose el coco, al igual que Moreno. Eso hay que evitarlo porque yo creo que esta temporada puede ser el año. Ojalá sea esta campaña, pero sin Joaquín Morales vinculado al Xerez ni como accionista mayoritario ni como presidente. Eso es lo que yo deseo. El que piense otra cosa, se equivoca. Por mis hijos digo que no es correcto. Estoy deseando salir del Xerez, además, lo necesito porque me va a costar una enfermedad».

sgalvan@lavozdigital.es