Operación esperpéntica
Uno quiere comprar y el otro dice que está deseando vender, pero la operación no se cierra. Y nadie acaba de entender los motivos, lo que ha provocado que las especulaciones y rumores se disparen. Me refiero a la venta del Xerez Deportivo, un club que hace no demasiados meses estaba al borde del abismo y que ahora, en lo deportivo, se encuentra a las puertas del cielo. Circunstancia ésta que alienta aún más esas especulaciones.
Actualizado:El todavía presidente y accionista mayoritario del club afirma que está deseando salir por patas y olvidar su experiencia en el mundo del fútbol. Vamos, que estás hasta los mismísimos. El empresario sevillano Francisco Nuchera dice, por su parte, que está encantado de hacerse con la entidad azulina y que tiene cantidad de ideas y proyectos para llevarla al lugar que merece, que todo el mundo entiende que es la Primera División. Y los dos, se supone que confirmando sus aseveraciones, llegaron a anunciar un acuerdo que, al parecer, quedaba pendiente de unos trámites insignificantes.
Pero hete aquí que han pasado las semanas y los meses y la operación no se cierra. El Xerez, mientras, ha protagonizado un buen inicio de temporada y está a medio pelo de los puestos de ascenso. Morales, por su parte, ha seguido gestionando como si nada fuese a pasar y renovando a jugadores, lo que ha mosqueado al supuesto comprador.
Total, que estamos igual. O peor. Con ultimatum incluido que ha quedado en papel mojado y sin saber a ciencia cierta dónde está ahora cada uno. Y, por si fuera poco, aparece Pedro Pacheco diciendo de las suyas.