Paella para tres mil
La peña 'La Familia' obtuvo el primer premio en la prueba gastronómica organizada en el recinto ferial, en la que participaron 72 grupos con una orquesta animando el baile de la multitudinaria fiesta
Actualizado:Más de tres mil personas se dieron cita en el recinto ferial de Las Canteras para celebrar la XXIII edición del concurso de paellas que todos los años organiza la veterana peña carnavalesca Hay moros en la costa. Sobre las once de la mañana comenzaron a llegar las distintas peñas y grupos de amigos para montar sus tenderetes y comenzar los preparativos para cocinar el suculento plato de arroz en paella, al que como es natural cada uno le dio su toque personal.
Pero los arroces hechos con mariscos, o pollo, conejo, chocos con su tinta y magro de cerdo, acompañados por el correspondiente refrito y verduras de diversos tipos, no estaban solos, ya que los participantes mientras se afanaban en cocinar el arroz, disponían de variados aperitivos, que acompañados por cervezas o vinos de la tierra ayudaban a que el cuerpo aguantara.
La novedad de este año es que estaba prohibido utilizar leña para hacer los fuegos, con objeto de evitar incidencias y posibles accidentes. Por lo que proliferaron los aros de gas butano.
Otra novedad fue que debido al gran número de participantes, los concursantes tuvieron que llevar las paellas terminadas a la mesa del jurado para que éste examinara y probara los diferentes arroces.
El primer premio lo consiguió el grupo de La Familia, logrando el segundo galardón la peña El Trocadero siendo el tercer puesto para Los del campo, premios que fueron entregados por la concejala de Fiesta, Rosa Rodríguez, la diputada de Cultura, Ana Mosquera y el representante de Cajasol, Cesar Custodio.
Durante el curso de la convivencia se realizó un hermanamiento entre la entidad carnavalesca anfitriona y la peña gaditana El Molino, cuyos presidentes intercambiaron unos regalos como recuerdo.
La fiesta, donde se mezclaron jóvenes y mayores, estuvo animada por la orquesta Azahar que estuvo actuando durante largo tiempo, ya que los concursantes y visitantes, después de haber llenado sus barrigas, se pusieron a bailar con unas enormes ganas de pasarlo bien y digerir el arroz.
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