Rota y el AFRICOM, el último fracaso de Bush
George Bush se despide de la Casa Blanca sin lograr poner en marcha «plenamente» el operativo del U.S. Africa Command (AFRICOM), que fue creado en febrero del pasado año y que tendría que haber estado plenamente operativo a comienzos este otoño: diversos recortes presupuestarios y reticencias políticas retrasan su puesta a punto hasta el año 2012. El proyecto se ha venido desarrollando durante los últimos diez años pero en ese periodo no ha sido posible llegar a ningún acuerdo con los gobernantes de los países a los que se ha propuesto dicha iniciativa y que no querían aparecer en ningún caso como una cabeza de puente de los intereses estadounidenses. El comando AFRICOM ha venido contando hasta la fecha con un equipo de 120 personas bajo el mando del general William E. Kip Ward, algunas de sus declaraciones al periódico Barras y Estrellas hicieron pensar en el traslado a Rota de las instalaciones de Stuggart: «Poner el mando en la base de Rota no es ni buena ni mala solución», respondió a la gallega hace meses a las preguntas de Ignacio Cembrero, en El País, durante una sospechosa visita a España antes de hacerse cargo de dicho mando. Los cuarteles generales de este mando militar se mantendrán en Kelley Barracks, en la localidad alemana de Stuttgart, que es en donde reside el Mando de Fuerzas estacionadas en Europa y que fue concebida como una sede temporal «para un futuro inmediato», tal y como se dice en la orden de creación del comando. Alemania mantendrá dicho operativo, «al menos por ahora», según puede leerse en una nueva edición de Stars and Stripes: 800 nuevos uniformes viajarán durante el próximo año hasta completar hasta 2012 la dotación de 1.300 hombres y mujeres que se fijó desde el inicio de este plan. De hecho, durante el pasado mes de octubre, EE UU emplazó en otra base alemana, la de Sembach, la sede del mando 17 de su fuerza aérea que complementa el mando africano y que, quizá en un futuro y en función de las nuevas relaciones entre La Moncloa y la Casa Blanca, podría desplazarse hacia Rota.
Actualizado: GuardarAfrica parece que no quiere participar activamente en un despliegue que supondría en gran medida un relativo alquiler de su costosa independencia. Al día de hoy, la única pica en Flandes que ha logrado consolidar la primera potencia mundial en dicho continente es el cuartel de Camp Lemonier en Djibouti, que cuenta con un despliegue de 2.300 soldados. Todos los indicios apuntan a que fue un bluff la intención de construir una superbase en Tan Tan, al sur de Agadir, en el Sahara ocupado por Marruecos, en excelente situación para proteger a los petroleros en tránsito y los oleoductos y gasoductos del norte, pero una hipótesis en tenguerengue desde que Mohamed VI, se negó explícitamente a recibir a la secretaria de Estado Condolleza Rice, quizá disuadido por las reticencias de Argelia y Libia que parecen extenderse incluso a países regimenes totalmente cómplices de EE UU como Liberia. Tras diversas negativas, la última baza que venía barajándose era la de Etiopía, aunque siguen sin existir planes definitivos al respecto. Para colmo, la crisis económica mundial y el alto coste de la guerra de Irak ha forzado al Pentágono a reconsiderar su política de construcción de nuevas bases.
Sin embargo, una cosa son las bases y otra son los mandos. Entre los competidores de Stuttgart para acoger este despliegue no sólo figuraban Rota y Nápoles, sino incluso los estados de Carolina del Norte y de Georgia, habida cuenta que en Florida residen los correspondientes a Oriente Próximo y al sur del continente americano. No importa donde esté ubicado el mando sino lo que haga, afirman los portavoces de AFRICOM, que han retrasado la ubicación del nuevo mando al otro lado del Estrecho hasta que se avance en el trabajo conjunto con los oficiales de las naciones asociadas al mismo y con las que se concretará operaciones a largo plazo: tanto intervenciones militares como operativos antiterroristas para proteger el transporte de combustible en una fuente de recursos energéticos que ya le disputan a EE UU naciones como India y China que obtiene 300.000 barriles diarios de petróleo en Sudán a cambio de armas. Y si la nueva carnicería que afecta a la República del Congo guarda relación con la obtención de minerales como el coltan o el wolframio, necesarios para las nuevas tecnologías, habrá que recordar que allí se emplazó uno de los principales mandos estadounidenses durante la guerra fría.
A partir de febrero de 2007, la Casa Blanca y el Pentágono se habían dado un año para consolidar una organización unitaria que agrupase a EE UU pero también a socios africanos con un compromiso a largo plazo. Y, al día de la fecha, eso sigue sin ser posible salvo que el flamante presidente Obama pueda movilizar en tal sentido a sus parientes de Kenia, uno de los llamados «estados pivote» del despliegue estadounidense en el continente negro, junto con Sudáfrica, Nigeria y Etiopía. No importa donde esté ubicado el mando sino lo que haga, afirman los portavoces, que han retrasado la ubicación del nuevo mando al otro lado del Estrecho hasta que se avance en el trabajo conjunto con los militares de las naciones asociadas al mismo y con las que se concretará operaciones a largo plazo.
¿De buena nos hemos librado en Rota? Está por ver. A Rota le puede caer un refuerzo importante en la JTF Aztec Silence creada en diciembre de 2003, bajo el mando del EUCOM y el control operacional de la VI Flota de EE UU, que se centra en operaciones de vigilancia, reconocimiento e inteligencia sobre organizaciones terroristas, para proporcionar información a los aliados del Norte de África. En el AFRICOM, también se especula con una mayor utilización de las Canarias por su emplazamiento geográfico en el continente, un supuesto que inquieta desde hace meses a la población de las islas. A Rota, en cualquier caso, se le podría asignar un papel relevante en la paulatina retirada de EE UU del polvorín de Irak, un plazo que la ONU fija en un año y que Bush quería retrasar tres. Más temprano que tarde, nuestro cielo se llenará otra vez de aviones tipo Galaxy.