Eto'o y Leo Messi bombardean al Valladolid en otra gran noche 'culé'
El camerunés, con cuatro goles, y el argentino destrozan al Valladolid No se echó en falta al lesionado Iniesta
Actualizado: GuardarEl Barça seguirá otra semana encaramado al podio de la Liga con otra goleada de escándalo ante el Valladolid. En ausencia de Iniesta, Messi se multiplicó para dirigir las andanadas azulgrana que Eto'o, con cuatro tantos, se encargó de materializar en otra espectacular noche en el Camp Nou.
Menudos dilemas. Plantar la defensa frente a tu área o sacarla veinte metros hacia fuera. Presionar la zona de construcción o replegarse atrás. Hasta el momento todos los rivales del Barça habían optado por un planteamiento más conservador hasta que llegó Mendilibar. El técnico vasco del Valladolid quiso ser valiente.
Planeó agobiar a los centrales azulgrana provocando que su defensa estuviese con la retaguardia demasiado despejada. Conclusión. El líder de la Liga también les metió cuatro goles antes del descanso.
El Barça de Guardiola supo manejar la situación. Márquez y Piqué tenían problemas para construir la primera acción de pase. Así que los azulgrana se saltaron el centro del campo. Le bastaron las incursiones de Alves y la movilidad de Messi para desnudar a su rival. El argentino perdió la banda para aparecer en todo el campo como de unión clave entre sus compañeros. Todas sus acciones tuvieron a Eto'o como protagonista, que marcó cuatro tantos en poco más de media hora. Estrenó su cuenta goleadora aprovechando con maestría una genial asistencia de Alvés. Siguió mojando tras un rechace de Asenjo a disparo de Henry. Continuó con una nueva definición de matador ante el portero vallisoletano para cerrar esa imparable racha aprovechando un rebote en Pedro López tras un intento de jugada maradoniana de Messi. El Barça fue un vendaval. Las acciones del crack argentino resultan imparables. Muchas de ellas nacen en acciones de contraataque que pillaban desguarnecida a la zaga rival. La clarividencia de Messi y la puntería de Eto'o lastraron la atrevida voluntad de Mendilibar.