Una piedra lanzada al agua
Actualizado: GuardarOliva Acosta, una de las organizadoras de “esta locura maravillosa”, anda de un lado a otro con el paso acelerado y la expresión tensa. Coge el móvil, busca a alguien, corrige algún detalle. En mitad de una conversación, se para en seco: “Aquí falta luz. Decidle a Gema que ilumine el pasillo”. Aunque los nervios de la puesta de largo van dejando lugar a un creciente sentimiento de satisfacción, todo sigue envuelto en un cierto halo de propuesta experimental. “Ya hemos hecho lo más difícil: pasar de lo intangible -la idea-, a lo tangible -la realidad-. Ahora nos queda esperar a que esta piedra que hemos lanzado al agua vaya expandiendo sus ondas”.
Para Oliva, hay que evaluar los aspectos concretos del desarrollo de Creactiva, pero sobre todo “hay que tener en cuenta su enorme valor como símbolo”. “Siempre decimos que en Cádiz hay mucha imaginación, pero también que nos falta valor o atrevimiento para convertirla en algo útil, no sólo desde el punto de vista comercial, sino también artístico. Pues bien, nosotros lo estamos haciendo, aquí y ahora”.
Acosta también destaca “las sinergias que estamos generando”. “Gente del mundo de la danza conversa con diseñadores, y éstos con músicos o fotógrafos, y ponen en común sus experiencias, lo que no deja de ser la semilla de quién sabe que insólitas colaboraciones”.