Solbes soporta el desgaste de imagen provocado por la crisis económica

La crisis económica es hoy mucho más grave de lo que era y parecía hace tres meses, pero le pasa menos factura a José Luis Rodríguez Zapatero de lo que el CIS del mes de julio parecía vaticinar. Su víctima en el Gobierno es otra: el vicepresidente económico y ministro de Economía, Pedro Solbes.

El veterano tecnócrata siempre había sido muy bien valorado por los electores, no sólo los de su propio partido, sino incluso por los de fuerzas opositoras que le profesaban respeto. Su primer suspenso llegó con el último barómetro del verano, en el que los ciudadanos le pusieron por primera vez una nota media inferior al 5: un 4,3. Ahora se queda en el 4 raspado.

En el arranque de la legislatura, según confiesan los propios socialistas, el Gobierno parecía desarmado por la coyuntura económica, lo que castigó también la imagen del jefe del Ejecutivo, que de un solo plumazo bajó casi un punto entero: del 5,58 de abril, justo después de las elecciones, al 4,75 en julio.

Sin embargo, el presidente ha logrado frenar ese descenso en la popularidad y, en el barómetro de octubre, se queda en el 4,73. La crisis económica, por tanto, se cobra su factura en la imagen pública del responsable de las finanzas públicas

Quien tampoco sube ni baja de manera significativa es el líder de la oposición. Mariano Rajoy cosechó en la anterior oleada un 3,99. Ahora está en un 3,88. Todo en un contexto económico que debería serle propicio porque el 63,4% de los españoles considera malo o muy malo el panorama y cuya salida ven lejana: el 47,5% cree que dentro de un año será aún peor.

Pocos aprobados

Del resto de los miembros del Gobierno, sólo tres logran el aprobado. La mejor nota es para la ministra de Defensa, Carme Chacón (5,17), a la que sigue muy de cerca la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de La Vega, que tampoco se resiente de la actual coyuntura y logra un ajustado 5,1.

A continuación, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, alcanza un 5,03.

Todos los demás ministros suspenden, pero la nota más baja es para la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, acaso porque es la más desconocida del gabinete.

En todo caso, el grado de conocimiento del Gobierno de Rodríguez Zapatero sigue siendo muy bajo. Mas del 60% de los españoles no saben quiénes son la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor; el de Cultura, César Antonio Molina; la de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, ni a la propia Aido.

Y apenas los vicepresidentes Fernández de La Vega y Solbes, así como los ministros Pérez Rubalcaba y Miguel Ángel Moratinos son identificables para más de la mitad de los españoles.