Victoria Abril encabeza el reparto femenino de 'Sólo quiero caminar' de Díaz Yanes

Victoria Abril es un torbellino. Traviesa, simpatiquísima, delgadísima y con el pelo largo y teñido de color oscuro, la estrella madrileña se muestra emocionada con la promoción de Sólo quiero caminar, thriller que se estrena este viernes dirigido por el cineasta con el que ejerció de hada madrina, Agustín Díaz Yanes.

Abril sonríe ante los piropos que le echan los periodistas por su trabajo en esta esperada producción en la que recupera a un personaje al que debe mucho, a Gloria Duque, la pobre y alcohólica joven que intentaba llevar una vida más digna en un violento Madrid de Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto. «Es que todavía no he visto la película, pero por las cosas que me decís... Sólo he venido a pasar la alternativa a estas maravillosas mujeres con las que comparto reparto. En realidad he venido a hacer de Pilar Bardem -en Nadie... encarnaba a su suegra-, el sacrificio era necesario. Esto es como cuando te van a abofetear, que ya vas poniendo cara porque sabes lo que te toca», dice.

Pitillo a pitillo y foto a foto, esta actriz sin método ha recuperado a ese personaje que tanto caló en la crítica y el público y le dio varios premios, entre otros un Goya y la Concha de Plata del Festival de San Sebastián. «Por primera vez, conozco al personaje, sé cómo habla, cómo vista y anda. No he tenido que buscar las luces y las sombras para dar profundidad al papel porque Gloria no sólo existe, hasta tiene carnet de identidad», asegura.

La también cantante, oficio que de momento ha aparcado, es la veterana de las cuatro mujeres que muestra Díaz Yanes en su cuarto largometraje, cuatro féminas de acción, vengativas y luchadoras que se las tienen que ver con peligrosos mafiosos mexicanos que se lo hacen pasar muy mal. «Ha sido duro. Fueron dos meses muy físicos. Una de las cosas que más me gustó fue rodar acción porque en una carrera como la mía sólo lo he hecho tres veces, y las tres con Díaz Yanes. Sea cual sea la edad que tengamos, las actrices tenemos necesidad de hacer acción. Por eso le agradezco mucho al director que haya creado a estas cuatro mujeres de acción y cargaditas de razón», expone.

Amiga de los extremos

Abril encabeza el reparto femenino de Solo quiero caminar, en la que da «la alternativa» a Ariadna Gil, Pilar López de Ayala y Elena Anaya. «Somos cuatro Magdalenas contemporáneas que tienen que salir adelante y están unidad por la cárcel, el miedo y la mala suerte», desvela.

Retomar a Gloria Duque le puso en un estado «no gaseoso. Sabía quién era, de donde viene y donde va. Son regalitos que te da la vida, no sé si se volverá a repetir porque no soy de las que suelo mirar atrás. Además, cuando quieres revivir cosas del pasado, normalmente te llevas una decepción. En este caso no ha sido así porque los hijos te salen dependiendo de quién sea el papá», declara.

En este caso, el padre es su buen amigo Díaz Yanes, que escribió tres historias que protagonizó -Baton Rouge, A solas contigo y Demasiado corazón- y le confió su debut detrás de la cámara con la aclamada Nadie hablará de nosotros cuando hayamos muerto y con el que repitió en Sin noticias de Dios. No obstante, la artista confiesa que quiere estar a las órdenes de gente nueva. «Es complicado que un director joven preste atención a las mujeres mayores de 40 años, pero yo lanzo el mensaje. Me gustan los extremos», manifiesta la actriz.