Un hombre hiere de gravedad a su mujer y a su hijo de quince meses con un cuchillo

Un hombre de 34 años apuñaló con un cuchillo de cocina a su mujer, que sufrió heridas en la zona dorsal, y a su hijo de 15 meses, que resultó herido de gravedad. El suceso ocurrió en la madrugada de ayer en Nívar, un pueblo de la provincia de Granada. El agresor fue detenido y puesto a disposición judicial. La madre y el bebé se encontraban anoche fuera de peligro.

Al parecer, el detenido, J.M.L.O, sufrió en el momento de la agresión una enajenación mental producida por una hipoglucemia, ya que es diabético, según informó la Guardia Civil. No era la primera vez que sufre episodios con pérdida de conciencia, según la familia, aunque nunca había llegado a actitudes agresivas. El vicepresidente segundo de la Sociedad Española de Diabetes, Edelmiro Menéndez Torre, corroboró que un diabético puede sufrir episodios como el del agresor de Nívar por una fuerte bajada de azúcar, «aunque no es habitual».

Pareja tranquila

Un vecino de la pareja no daba crédito a lo ocurrido porque «nunca» pensó que el hombre pudiera atacar a su mujer y a su hijo, ya que es una persona «muy tranquila, agradable y de trato afable».

Según su testimonio, su mujer se refugió con el hijo de ambos en la casa de otro vecino tras la agresión, ocurrida en el domicilio familiar, y poco después, «cuando él volvió a la consciencia, empezó a gritar lamentándose por lo que había hecho». «La mujer está hecha polvo, porque ni ella ni nadie se esperaba que pudiera ocurrir esto, ya que siempre se les ha visto muy bien juntos», ha referido el vecino a los periodistas.

La Guardia Civil descartó en un principio que pueda tratarse de un caso de violencia machista, ya que el presunto agresor carecía de antecedentes y, según su familia, no es violento y en otras ocasiones había sufrido algún episodio de enajenación mental con pérdida de consciencia, aunque en esos casos no se mostró agresivo

Sin embargo, la consejera para la Igualdad y el Bienestar Social, Micaela Navarro, discrepó de la Guardia Civil. «Sabremos si se trata de un caso de violencia de género o no cuando el juez intervenga, pero todo parece indicar que así ha sido», subrayó la consejera.