CELEBRACIÓN. Murray lo festejó a lo grande. / EFE
TENIS

Murray se proclama campeón del Masters Series de Madrid

Superó en dos sets al combativo francés Gilles Simon gracias a la fortaleza de su saque, su valentía y su habilidad

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Andy Murray, de 21 años, cuarto jugador del ranking mundial, es el nuevo campeón del Masters Series de Madrid. En la final se impuso al francés Gilles Simon (16) por 6-4 y 7-6 (6) en una hora y 34 minutos. Murray, nacido en Dunblane (Escocia) el 15 de mayo de 1987, aprovechó su saque para presionar a un rival que luchó tremendamente una vez más. A favor del galo, que este domingo ocupó primeras páginas en los periódicos de su país por su victoria en semifinales sobre Rafael Nadal, cabe remarcar su capacidad para la lucha. Volvió a correr como un gamo, de uno a otro lado de la pista. Su problema fue que no acertó a utilizar el servicio como arma importante.

Murray recibió un premio de 360.000 dólares y Simon se embolsó 180.000. Para uno y otro, sin embargo, lo de menos fue la recompensa en metálico. Ambos se sintieron felices de haber llegado a la final, en la que ejerció más firmeza el escocés, verdugo el día anterior de Roger Federer.

Del partido entre Murray y Simon no podía esperarse demasiado en cuanto a la calidad del juego. Curiosamente, ambos parecen cortados por el mismo patrón. Su tenis es muy similar. Lo desarrollan desde el fondo de la pista. Además, por momentos se limitaron a devolver la pelota sin mayor malicia. Sólo esporádicamente apretaron el ritmo. En realidad, fundamente llevaron a cabo lo que se llama tenis cruzado. Fueron los golpes en diagonal los que llenaron casi siempre el juego. Los tiros paralelos quedaron para otros ratos. El encuentro se desarrolló con bastante lentitud. Si acaso Murray aceleró el ritmo. Por lo pronto, cerró el primer set con tres puntos de saque directo y en el décimo juego de la segunda manga volvió a hilvanar tres aces consecutivos. La clave de la victoria para Murray estribó en su valentía y habilidad para frecuentar la dejada en el segundo set. Con ese recurso forzó el movimiento de su rival, que se encontró en serias dificultades.

En cualquier caso, Simon se despidió de Madrid como nuevo número 9 del mundo, además de situarse como líder de la clasificación francesa.