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Al cero por decencia
Benigno Sánchez se rapó la cabeza por «no trabajar como se debe»
Actualizado: GuardarBenigno Sánchez, entrenador del Ceuta, sorprendió a propios y extraños en la rueda de prensa del jueves 25 de septiembre. Su equipo había caído derrotado el día anterior en Antequera y su cabreo llegó a tanto que no dudó en raparse al cero como castigo por la derrota.
El técnico murciano (Cieza, 30-3-70) acudió a la cita sin su inseparable gorra y mostrando un cráneo tan reluciente como una bola de billar. No tardó en contestar al bombardeo de preguntas al que los periodistas le sometieron buscando una explicación a su rapado. Por «no trabajar como debe», contestó el entrenador ceutí, quien pensaba que «raparse y verse cada día en el espejo» le recordaría que «tengo que trabajar más por el Ceuta», dijo en su momento.
De momento, la reacción ha sido a medias ya que cuatro días después el Ceuta recibía en el Alfonso Murube a un Betis que acabaría empatando (1-1) tras aprovecharse de una superioridad numérica gracias a la expulsión de De Lerma.
De momento, su rapado no se ha traducido en puntos aunque Benigno Sánchez sabe como levantar la moral de su equipo para un partido tan importante como el de mañana. Dice no conformarse con el empate aunque el técnico murciano precisa que «todo lo que sea sumar» es un resultado positivo.
Benigno Sánchez insiste en que confía «plenamente» en sus jugadores. Y tiene sus razones, porque, a su juicio, «están trabajando mucho para mejorar» .
Sobre posibles cambios en la alineación, después del empate cedido el pasado domingo en casa frente al Betis B (1-1), ha dicho que el «núcleo duro va a continuar».
La trayectoria de Benigno en Ceuta le ha valido para ganarse el cariño de la afición desde que aterrizara a finales de la campaña anterior. Llegó a falta de 15 jornadas, con el equipo octavo a cuatro puntos de los play off, y consiguió clasificarlo tercero. En los play off pasó la primera ronda al eliminar al Pontevedra pero en la segunda y definitiva cayó ante el Girona por un global de 1-0. El Ceuta se quedó a un gol del ascenso. Nunca estuvo tan cerca en las cinco liguillas disputadas en una década. Y fue con Benigno en el banquillo. Pero con pelo.