El afrancesado
Nuestro afrancesado de guardia, menester que ejerce cuando actúa como Vicepresidente de la Diputación, se transforma en el Napoleón de los últimos tiempos, cuando se desempeña como secretario general del PSOE gaditano, sobretodo por su afán en perpetuarse como «gaditanum imperator» de dicho partido. Tras su victoria, está a punto de cumplir su sueño de ser recordado como doceañista, porque no es improbable que sean esos los años que consiga estar al frente del PSOE local.
Actualizado:En otra de las candidaturas, Piniella iba sobrado, pero no habría sido nunca un buen aparatchnik, porque para ello es condición indispensable que los garbanzos dependan del partido, circunstancia que no concurre en él, que los gana fuera de la política. Para ser un buen secretario general es además, imprescindible atenerse al guión: lanzar consignas a los suyos y repartir estopa a los adversarios. Gente como Piniella que podría tener la ocurrencia, políticamente heterodoxa, de escuchar a los militantes, son más peligrosos en la orgánica de un partido que los propios adversarios. La tercera lista era más ortodoxa, su líder es Inspectora de Educación, eximio cuerpo para cuya pertenencia no es desdeñable el mérito curricular de ser militante o simpatizante del régimen.
Hace años en tono humorístico, Antonio Fernández consejero de Trabajo, me decía que a los aparatchnik no se les podía cambiar o simplemente echar, para ello -añadía irónicamente- habría que matarlos porque si no, siempre vuelven, obviamente en busca del condumio.
Tampoco ayuda para promover el cambio, la percepción que los militantes suelen tener de su papel cuando llegan las elecciones en los partidos. Da la impresión de que la mayoría están dispuestos a cambiar su voto por una adjuntía de cualquier vicesecretaría ya adjunta. Cuando ocurre como en el PSOE de Cádiz que cuenta con mas de 600 militantes la cosa se complica, de modo que si Pérez Peralta quiere satisfacer a sus votantes, va a tener que crear tantos cargos en la nueva ejecutiva local que para poder reunirse le tendrá que pedir el Carranza a Teófila.