Alonso no desvela su futuro aunque ya tiene tomada una decisión

Fernando Alonso estaba descansado, tranquilo y sonriente mientras atendía ayer en el circuito japonés de Fuji a los numerosos periodistas que se agolpaban en torno a él, como en los mejores tiempos de sus títulos. Unos días de vacaciones en Asia, saboreando la victoria de Singapur, le han sentado estupendamente al asturiano, que llega a Japón con la idea de dar otra sorpresa, aunque también es consciente de que no será fácil, a no ser que suceda algo favorable como en la carrera nocturna.

Alonso, aunque está centrado en el GP de Japón y en su situación personal, también está preocupado por el futuro de la Fórmula 1 y no ve tan claro que el rumor de la descongelación de los motores sea favorable para Renault. «No sé lo que va a ocurrir. Si eso pasa no sé si nos viene bien o mal. Seguramente a unos les vendrá bien y a otros no tan bien, porque tienen un poco de ventaja. No me parece bien, porque si hay congelación de motores para cinco años, luego a los dos años no puedes liberarla. Hay que tener un poco más de consistencia en la reglamentación», apunta el asturiano. Al bicampeón del mundo no le falta razón, ya que las normas de la F1 cambian con demasiada frecuencia en función de quién vaya ganando.

Si desde Australia se le viene preguntando a Alonso por su futuro, ahora que se acaba la temporada no iba a disminuir el interés por su destino. Aunque no desea desvelar aún su futuro, asegura que ya tiene tomada la decisión. «Más o menos ya sé lo que haré el año que viene», respondió el asturiano a la prensa española.

Sin embargo, con la prensa extranjera fue más ambiguo, y afirmó que hasta final de temporada no sabrá dónde va a estar, y eso que no hay más que dos posibilidades: Honda y Toro Rosso. El resto de los equipos ya tienen sus formaciones cerradas para 2009. Cuando se le preguntó si alguno de estos equipos es una alternativa para él, el asturiano estalló con una carcajada. «No lo sé. Yo corro con Renault, estamos aún en 2008 y tengo contrato con ellos para el año que viene. Tengo la posibilidad de ejercer la extensión del contrato o no. Estoy tranquilo y concentrado en este año. No espero para anunciar mi decisión para que la prensa hable y especule. Sólo espero a que acabe la temporada y hacer el mejor trabajo posible y después veremos qué pasa. No es ningún problema saber qué voy a hacer el año que viene. Seguro que tengo un coche competitivo de todas formas. Necesito trabajar mejor que los otros en invierno, y eso es más importante que cualquier cambio de equipo», comentó.

Alonso dice ser consciente de que tiene la clave del mercado de pilotos, pero insiste en que «hasta que acabe la temporada hay tiempo para tomar una decisión. No importa si espero o no. Si eso es un problema, lo será para mí también, pero no creo que eso sea un problema para nadie», subraya. Sobre BMW, que anunció el lunes que sigue sus dos pilotos, Kubica y Heidfeld, Alonso se mostró contundente: «BMW nunca fue una posibilidad real para mí».