El clan de los Macandeses cae de nuevo y sólo dos años después de su condena por narcotráfico
Sus miembros habían regresado a la distribución de coca, ayudados por narcos colombianos y otras bandas de Cádiz
Actualizado:La Policía Nacional define a este clan de Chiclana de «histórico» del narcotráfico en la provincia. Son una de esas familias que al oir su nombre se le vincula rápidamente al mercado de la droga como los Follarranas, Antón o Cagalera. Los Macandeses, que habían sido desactivados en 2003 y condenada la mayoría de sus miembros por la Audiencia Provincial en 2006, regresaron de nuevo al negocio y la Policía los ha vuelto a detener en una operación conocida ayer y que se asemeja a la desarrollada cinco años atrás.
La familia, de etnia gitana, había reabierto conexiones con narcos colombianos y se ayudaba de otras bandas asentadas en la provincia para hacer circular la cocaína por Cádiz. El mismo negocio, la misma estructura.
La Policía confirmó ayer el arresto de ocho personas, una de ellas de nacionalidad colombiana, y daba por desarticulada la organización, que llevaba siendo investigada desde principios de año.
Los seguimientos efectuados a Los Macandeses en la primera fase de la operación confirmó que mantenían contactos permanentes con otros clanes, también de etnia gitana, afincados en Jerez y en el Campo de Gibraltar. El primero les servía a la familia de Chiclana para abastecerse de droga porque estos individuos adquirían cocaína a narcos colombianos residentes en Madrid.
Una vez que la droga estaba en poder de Los Macandeses, estos se desplazaban a La Línea y Algeciras, donde se ayudaban de tres hermanos, que cuentan con un largo historial delictivo, para distribuir los estupefacientes.
La Policía destacó de estos traficantes la «alta peligrosidad» que demostraron durante el desarrollo de la operación. Así, uno de ellos, en el momento de ser detenido, agredió a un policía produciéndole diversas heridas antes de robar con violencia e intimidación un ciclomotor a una mujer para darse a la fuga.
Los funcionarios intervinieron, además, dos pistolas y una de ellas resultó ser de un oficial de Policía que le fue robada cuando estaba destinado en Sevilla en el año 2000. Asimismo, fueron incautados tres kilos de cocaína, 45.000 euros y cuatro vehículos de alta cilindrada.
12 de los 17 miembros de Los Macandeses fueron sentenciados por la Audiencia Provincial tras llegar a un acuerdo Fiscalía y defensas. Pero la mayoría fue condenada a penas que oscilaron entre tres y cuatro años, por lo que al poco tiempo quedaron en libertad. Tan sólo la matriarca, una de sus hijas y una traficante de Colombia recibieron castigos mayores -nueve años y medio- al reconocer que distribuían la cocaína.
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