Obras y flores
Por fin se ha asfaltado el nuevo viario provisional del muelle. Parece mentira que, algo tan simple y sencillo, haya tenido que hacerse después de soportar durante varios meses la incomodidad del tránsito rodado por ese adoquinado tan irregular y esas vías de tren que nos han dado más de un disgusto a los conductores. Es una prueba más de la inoperancia de nuestros rectores. ¿No podía haberse efectuado antes de abrirlo? Ahora querrán flores para su gestión.
Actualizado:Ya estamos empezando a sufrir las primeras incomodidades de lo que sin duda se agravará a lo largo de estos años para preparar las infraestructuras del 2012. El acceso a Cádiz por el Río San Pedro cada día nos depara una sorpresa. Unas veces tenemos tres carriles, al día siguiente uno, al otro dos pero con una chicane, no hay quien se aclare. Esa obra, que comenzó hace casi un año, no tiene el adelanto que desearíamos. Hay días, muchos por cierto, en que no se ve ningún obrero trabajando, así meses y meses. ¿No se podían haber centrado y dejarlo resuelto hasta enlazarlo con el acceso al nuevo puente? No, hay que mantenerlo en obras el mayor tiempo posible, para gloria de nuestra querida doña Magdalena y que pueda inaugurarlo con toda pompa, boato y flores «cuando más convenga».
Otro de los ejemplos de inoperancia ha sido, durante el pasado verano, el mantenimiento del nudo de Tres Caminos. Allí, día tras día, se han seguido formando atascos desesperantes. Ya al final del verano, en pleno septiembre, alguien tuvo la feliz idea de modificar las rayas de la carretera y pintar tres carriles de ida y vuelta a Chiclana. Se mejoró el tráfico y los encargados de Obras Públicas no tardaron en echarse flores. ¿Con las macetas se las echaba yo a todos! ¿Pa que les lleguen antes!