«En el rugby hay quince puestos y alguno seguro que es el tuyo»

-¿Qué es lo que le atrajo del rugby para iniciar su andadura como jugador?

-El encontrar un deporte nuevo que aportaba cosas diferentes a fútbol o baloncesto, por ejemplo.

-¿Y cuáles son esas diferencias fundamentales que hacen de éste un deporte especial?

-Por encima de todo está el compañerismo que se vive durante y después del partido, tanto con tu equipo como con los rivales. Alrededor del rugby existe una gran vida social, yo por ejemplo hace poco que he ido a la boda de un contrario que conocí tomando algo después del partido, en lo que llamamos el tercer tiempo.

-En un deporte tan físico ¿no resulta en ocasiones complicado mantener tanto autocontrol?

-Está claro que cualquiera no puede jugar porque hay que estar muy centrado de cabeza. Eso no quita que, como en todos los deportes, a veces te encuentres un descerebrado, pero es ley de vida.

-¿Qué cualidades hay que tener para jugar?

-El físico y la buena forma son fundamentales.

-Es usted uno de los muchos gaditanos que debe irse al 'exilio' de El Puerto para jugar...

-Sí, pero debe de quedar claro que los que vamos allí es porque nos han dado un recibimiento maravilloso. Yo ya llevo 10 años en el CRAP y me considero uno más.

-¿Qué le falta a Cádiz para tener su propio equipo?

-Sobre todo factor humano. Es un deporte físico y eso obliga a contar con una plantilla muy amplia. Sería impensable enfrentarse a una temporada sólo con quince jugadores. De todas maneras en Cádiz animo a todo el mundo que sienta curiosidad a venir jugar con nosotros a la playa de Santa María del Mar, junto al cementerio. Les recibiremos con los brazos abiertos y les enseñaremos lo que esté en nuestras manos. Hay una frase que a mí siempre me ha gustado decir: «en el rugby hay quince puestos y alguno seguro que es el tuyo». Nuestras puertas están abiertas para todos.