Enrique López y Francisco José Hernando, cuando todavía ocupaban planza en el Consejo General del Poder Judicial. /ARCHIVO
DESIGNACIÓN DE JUECES

El Senado retrasa una semana la renovación del TC a la espera de que PP y PSOE pacten los candidatos

Para convertirse definitivamente en los magistrados designados por la Cámara Alta los candidatos deben obtener una mayoría de tres quintos

MADRID Actualizado: Guardar
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El Senado va a demorar durante al menos otra semana el proceso de designación de los cuatro magistrados para el Tribunal Constitucional (TC) porque los servicios jurídicos de la Cámara Alta aún no ha concluido el informe sobre la idoneidad de los 23 candidatos remitidos por los parlamentos autonómicos.

El portavoz adjunto de los socialistas en el Senado, José Miguel Camacho, ha explicado que existe la posibilidad de que sea necesario pedir a las comunidades autónomas información adicional sobre los candidatos.

La pasada semana, el Senado recibió la lista de candidatos elegidos por los parlamentos autonómicos, un total de 23, entre los que figuran los dos únicos nombres propuestos por el PP, los ex miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Enrique López y Francisco Jose Hernando. Ya el pasado martes, el presidente del Senado, Javier Rojo, remitió el listado a la Secretaria General para que elabore un informe que constate la idoneidad de los aspirantes.

Se aplaza la comisión de nombramientos

La portavoz del PSOE en la Cámara Alta, Carmela Silva, apuntó entonces que ese informe podría estar listo este martes para verlo en la reunión de portavoces y que así Rojo pudiera dar el siguiente paso en el proceso, que es fijar la fecha de convocatoria de la Comisión de Nombramientos, en la cual se votarán los cuatro nombres que pasarán posteriormente al pleno.

"Por lo que ha comentado Rojo" en la Junta de Portavoces, apuntaba Camacho, la documentación de cada uno de los aspirantes es "muy amplia", lo cual exige analizarla "con detenimiento".

Para convertirse definitivamente en los magistrados designados por la Cámara Alta deberán obtener una mayoría de tres quintos en la votación del pleno. En el caso de no lograr esta mayoría, el reglamento de la Cámara prevé que sean los grupos parlamentarios los que formulen sus respectivas propuestas.