Gaspar Llamazares anuncia su dimisión con un llamamiento a la unidad y «amabilidad» en IU

El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, ha asegurado hoy que anuncia su dimisión un mes antes de la celebración de la Asamblea Federal de IU, prevista para los días 15 y 16 de noviembre, para que ésta comience "en positivo" y sirva para contribuir a la conciliación de los tres sectores políticos enfrentados en la formación que dirige. Además, ha considerado que el partido "tiene que mejorar la amabilidad interna" y ha adelantado que permanecerá como diputado en el Congreso el resto de la legislatura.

Oficiosamente se apunta a que su renuncia al cargo será concretamente el 25 de octubre ante la Asamblea de IU de Asturias, acto simbólico ya que fue ésta la que le propuso como coordinador general en 2000, aunque no ha confirmado la fecha en la rueda de prensa que ha ofrecido en la sede federal. Llamazares ha asegurado que tomó la decisión de dimitir en los últimos días, "no influido por la presión" de sus adversarios, quienes en realidad, según ha explicado, han sido "un acicate". Ha afirmado además que su decisión no tiene elementos de "resistencia" ni la hace "en negativo".

Llamazares ha asegurado que sus años como coordinador de IU han sido la "mejor etapa" de su vida, y ha recalcado que ha sido un "honor" representar a una organización "que tiene un gran futuro". "Estoy convencido de que la próxima Asamblea de IU no debe ser la del reproche o el retrovisor, sino para el futuro de IU. Tiene que ser de debate político, no de personas, y debe proponer a la sociedad una salida de izquierdas a la crisis", ha resaltado.

Intenta esquivar una Asamblea de "reproches"

Ante la sorpresa que ha suscitado el anuncio de Llamazares de dimitir de su puesto tres semanas antes de la Asamblea (formalizará su decisión el próximo 25 de octubre en la Asamblea Regional de Asturias), fuentes de IU han explicado que el todavía coordinador y su entorno quisieron realizar la Asamblea de relevo en el mes de julio. Sin embargo, la fecha se retrasó a noviembre debido al acuerdo entre el PCE y la denominada 'tercera vía'.

En esta línea, Llamazares ha asegurado que dimite porque empecinarse en el cónclave en un informe de gestión de su mandato sería un "flaco favor" a IU, ya que la Asamblea "empezaría con reproches del pasado". Según ha afirmado, con esta decisión "despeja la duda" sobre si quiere condicionar la Asamblea, y ha afirmado que tras esta decisión "no hay ningún plan B". "Estoy con el apoyo al proceso asambleario. Llamo a la participación de todos y yo también participaré. Viva IU", ha subrayado.

"Militante corresponsable y leal"

Acerca de su continuidad como diputado y de las hipotéticas dificultades de coordinación con la nueva Dirección, ha señalado que él no está de acuerdo con la "liquidación del patrimonio de IU", y ha considerado que las organizaciones son "más importantes en la medida que son capaces de compaginar militancia y dirección".

Para Llamazares, no estaría bien que tras la Asamblea Federal, la coalición cree una situación de "inestabilidad y de falta de perfil en el Congreso". Eso sí, ha querido dejar claro que colaborará con cualquier coordinador y se atendrá a las directrices de la nueva Dirección, porque él es un "militante corresponsable y leal".

"Me voy a mantener en el Congreso toda la legislatura. No voy a hacer el harakiri a los dirigentes de IU, y mucho menos me voy a hacer el harakiri a mi", ha destacado el todavía coordinador, quien ha agregado que de su etapa al frente de la coalición se queda con "haber sido junto a otros cabeza de las movilizaciones contra la guerra de Irak y nunca haber dejado de hacer política".