SALTO. El Puerto Real no sale de la crisis. / VÍCTOR LÓPEZ
TERCERA DIVISIÓN

El Puerto Real sigue en su espiral negativa y cae ante el Sanluqueño

Un gol de José Mari decide el choque tras marrar un penalti Pedro Curtido Winde tuvo que pasar a observación médica tras sufrir vértigos y mareos

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El Puerto Real sigue la senda bajista en su cotización. Ayer fue superado por un Atlético Sanluqueño que solo tuvo que oponer orden en su disposición sobre el terreno de juego y esperar el fallo portorrealeño para hacerse con los tres puntos en liza. Un solitario gol de José Mari a los 65 minutos resolvió el encuentro, donde la jugada clave pudo situarse en el arranque del mismo. A los siete minutos Pedro Curtido tuvo en sus botas un cambio en el signo del partido, pero el penalti que lanzó no terminó en gol, y eso pesó como plomo en las expectativas de la inversión local, tirando al suelo el valor de sus acciones.

Y no empezó mal

No empezó mal el equipo que ahora tiene a Manolo Santana en el banquillo, pero lo halagüeño que prometía el penalti señalado por derribo de Ezequiel a Winde, se disipó cuando Curtido tiró tan extremadamente flojo y facilitó que Jero pudiera sacar a saque de esquina.

Para colmo de males, la lesión de Winde -que le obligó pasar a observación médica por los mareos y vértigos que sufrió en el campo- terminó de complicar cualquier reparto de dividendos que se vislumbrara. Desaparecido Palacios, con Pablo Niño en tono menor, la ausencia de Winde y el bajón moral del fallo del penalti hizo que el Puerto Real tomara camino de números rojos.

En la segunda parte, la reacción local no solo no llegó, sino que se facilitó el camino a los sanluqueños. A los 65 minutos, Pablo Niño se enreda en demasiados regates y pierde un balón en mediocampo. La subsiguiente jugada por la izquierda llega a José Mari en la frontal y su disparo raso y ajustado no es alcanzado por Raúl. Apenas un disparo de vaselina -muy corta- de Curtido es lo único que supo oponer un Puerto Real tras ese tanto. Y así el equipo de La Villa se queda muy cerca de sus mínimos anuales (a dos puntos de la zona de descenso).