La muerte de un buen hombre
El viernes tuve la oportunidad de contarle al chofer que me recogió en el aeropuerto de mi experiencia como voluntaria durante varios veranos consecutivos en Barretstown, campamento fundado en 1994 por Paul Newman en Irlanda. El sábado fue él quien me dijo que Paul había fallecido.
Actualizado: GuardarEl campamento da la bienvenida a 500 niños de 16 países europeos, con edades de 7 a 16 años, durante el verano; niños con enfermedades principalmente oncológicas. Paul ofrecía estos programas gratuitos, incluyendo desplazamiento, estancia y cuidado médico a niños y voluntarios, que al llegar descubren un ambiente de cuidado y apoyo que genera cambios reales en sus vidas.
Mientras muchos amantes del cine lloran por la pérdida de uno de los iconos de la pantalla, en Irlanda y el resto de Europa recuerdan su devoción hacia los niños enfermos. Él lo hacía posible, los niños lo hacen realidad.
Lucía Jaen Bernaola. Arcos