La Policía italiana detiene a 30 integrantes de la camorra napolitana

La Policía italiana ha asestado un duro golpe al clan de los Casalesi, de la Camorra napolitana, al detener a 30 mafiosos, entre ellos cuatro capos de la "familia". Además, ha emitido órdenes de arresto contra 77 mafiosos ya encarcelados y se ha incautado de bienes por valor de 100 millones de euros.

En la operación policial, según ha detallado la Dirección Central contra la Criminalidad, han participado 500 agentes. Entre los detenidos está Giuseppina Nappa, esposa de Francesco Schiavone, apodado 'Sandokán', encarcelado desde 1998 y considerado todavía el jefe del clan. Nappa está acusada de chantaje y encubrimiento y de haberse quedado con el dinero que la organización criminal asegura todos los meses a los miembros del clan encarcelados.

Los otros detenidos destacados son los capos Alessandro Cirillo, alias 'el sargento', y Oreste Spagnuolo y Giovanni Letizia, considerados los inductores y ejecutores de la matanza de Castelvortuno, localidad de la provincia de Caserta (cercana a Nápoles) donde el pasado 18 de septiembre fueron asesinados un italiano y seis inmigrantes africanos. Los tres están considerados miembros del ala "dura" y los agentes les aprehendieron varias pistolas de gran calibre y metralletas.

El jefe de la Policía, Antonio Manganelli, ha explicado que Cirillo, Spagnuolo y Letizia pertenecen, al igual que otras cinco personas en busca y captura, a una fracción escindida de la "familia" de los Bidognetti que, junto a los Schiavone, son las más fuertes de las que integran el clan de los Casalesi. Asimismo, ha comentado que este pequeño grupo de 'scissionisti' (separatistas) llevó a cabo los asesinatos de Castelvolturno para dar "una prueba de fuerza".

Más de 100 millones en bienes

Según fuentes policiales, la investigación ha permitido descubrir que "las riendas" del clan de los Casalesi continúan en manos de Schiavone a pesar de que éste se encuentra en la cárcel condenado a varias cadenas perpetuas. Además, ha permitido la reconstrucción de casos de extorsión por parte de los Casalesi, los "sueldos" que reciben los afiliados al clan, que oscilan entre 1.500 y 4.000 euros, y las cuotas que pagaban numerosas compañías a la mafia.

El ministro del Interior, Roberto Maroni, ha asegurado en Roma que con esta operación "se ha infligido un golpe durísimo contra los Casalesi y la Camorra " y ha añadido que se trata de "una jornada para enmarcar" en la historia de lucha contra la criminalidad organizada. Asimismo, ha subrayado que la guerra contra la Camorra continuará hasta que sea vencida.

Paralelamente, la Policía Fiscal ha confiscado al clan de los Casalesi inmuebles y otros bienes en las provincia de Caserta, en las regiones de Lazio y Toscana por valor de cien millones de euros.