La lluvia resta público a la recta final de la Feria de San Miguel de Arcos

Arcos ha vivido un final de la Feria de San Miguel 2008 marcado por las precipitaciones, restándo éstas mucho público a la celebración. La lluvia hizo acto de presencia durante la mañana, mediodía y noche del sábado y durante toda la jornada del domingo, aunque de manera intermitente. A esto hay que añadir, según algunos caseteros, que a pesar de la vistosidad de las primeras jornadas se ha notado menos presencia de público que en ediciones anteriores, fundamentalmente, a parte de por la lluvia, por los efectos de la crisis económica, entienden.

Al margen de los problemas climatológicos, los arcenses disfrutaron del ambiente festivo resguardándose en las 30 casetas con las que cuenta el Real. Aprovechando los parones de la lluvia para pasear por las calles del recinto y por la zona de los cacharritos. Además pudieron disfrutar de celebraciones como la final del Concurso de Sevillanas y la entrega de trofeos y premios, ambas en la Caseta Municipal, contando con mucho menos público de lo habitual.

La noche concluyó con el tradicional lanzamiento de fuegos artificiales y los más atrevidos desafiaron a las inclemencias meteorológicas, apurando los últimos coletazos de la celebración.

Sábado

Diferente a la del domingo fue la jornada del sábado en la que las precipitaciones dieron un respiro, a eso de las 17.30 horas, y el Recinto Ferial se llenó de arcenses, dispuestos a disfrutar de la fiesta. Algo que se prolongó hasta la medianoche cuando las precipitaciones volvieron a hacer acto de presencia. A eso de las dos de la mañana las mismas se hicieron más intensa y el Real no tardó mucho en quedarse vacío, cuando habitualmente la fiesta suele prolongarse hasta primeras horas de la mañana.

Esto supuso que, durante la tarde, las calles del Recinto Ferial se encontraran repletas de público, viviéndose un gran ambiente festivo. Los caballos, las mujeres vestidas de flamenca, los niños acompañados de su alegría y los paseos de las familias por las calles del Real dieron el colorido habitual que suele desprenderse de la Feria más importante de la Sierra.

Las actuaciones en directo en diversas casetas, como la de El Paseillo, y los concursos de sevillanas de la Municipal y la de Izquierda Unida fueron las encargadas de amenizar la jornada mientras que las lluvias persistieron, durante el mediodía. La tarde la abrió el festejo taurino mixto que se celebró en la plaza portátil, ubicada en pleno Recinto Ferial, y que también sirvió para dar ambiente a la última de las ferias serranas del año.

En la celebración taurina participaron el rejoneador Joao Moura hijo (silencio y dos orejas), Juan José Padilla (oreja y silencio) y Octavio Chacón (silencio y silencio). El evento congregó a más de 1.500 aficionados que, posteriormente, disfrutaron de la fiesta en el Real.

La Caseta Municipal gozó también de un buen ambiente, para una jornada tan inestable, con la actuación de los participantes del programa televisivo Se Llama Copla, de Canal Sur, Carmen Cinta, Joaquín Sáez, María del Carmen Abad y Patricia García, que se llevó a cabo desde las doce de la noche y que protagonizó un lleno absoluto de la Caseta Municipal. Una actuación que congregó tanto a público juvenil como a mayores.

Tras la celebración de las fiestas, el municipio serrano vivirá hoy un día de resaca y descanso, debido a que se celebra la festividad de San Miguel, patrón de la localidad.

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