Pedro Dávid Pérez se alza con el primer puesto del XII Rally Sierra de Cádiz

La duodécima edición del Rally Sierra de Cádiz, valedero para el Campeonato de Andalucía, partió ayer del municipio de Prado del Rey. Tras la tarde del viernes, en la que se llevaron a cabo las verificaciones técnicas y el recorrido por el pueblo para mostrar los coches, ayer tomaron la salida 64 pilotos de los 69 inscritos. La prueba se saldó con la victoria del piloto del A.C Granada 2001, David Pérez y, el copiloto, Ignacio Ramírez, que con su Peugeot 206 Súper1600 se subió a lo más alto del podium. Este puesto no peligró en ningún momento puesto que el piloto de la escudería granadina mostró su domino en los once tramos que componían el recorrido. Dichos tramos se disputaron en cuatro zonas, Grazalema, Benamahoma, Los Alamillos y Zahara.

El segundo puesto lo ocupó Francisco Ollero, de Escudería Sur, con su Mitsubishi Lancer Evo VIII. Mientras que la tercera posición terminó siendo para Juan Camacho, del equipo RS Sport, con el mismo coche que Ollero. Esta posición tuvo que disputársela con Pedro Cordero y Óscar Gil, ambos de su mismo equipo.

El Desafío Peugeot-Volante RACC, por su parte, fue para el piloto arcense Ángel Rondán, que quedó octavo en la clasificación general.

Abandono y suspensión

En principio, partía como favorito el gallego Manuel Redondo, con un Fiat Abarth GR, por su espectacular coche y sus dotes al volante, aunque finalmente rompió el cambio de marchas y decidió retirarse, para evitar una avería mayor. Otra de las grandes decepciones para el público ha sido la retirada de Francisco Javier Agüí que con su Clio Wiliams tuvo que abandonar en el tramo de Grazalema debido a un problema con una de las ruedas tras salirse de la pista, cuando se encontraban dentro de los tres primeros clasificados. También Javier Galán, cuando se situaba en el segundo puesto, no pudo terminar el Puerto de las Palomas y ha sido cuando se ha decidido la clasificación final.

La principal incidencia de la jornada se dio en el tramo A-2, Grazalema, en el que Víctor Fernández rompió el cárter de su Renault Clio Williams, dejando un reguero de aceite por el asfalto. Ante estas circunstancias, y con el fin de preservar la seguridad de los participantes, la organización decidió neutralizar dicho tramo. Además de esto, un total de 27 participantes tuvieron que abandonar la carrera, por roturas o salidas, aunque «no se produjeron incidencias significativas», según la organización.