Los hoteles de Novo afrontan sin síntomas de crisis la llegada de la temporada baja

Las grandes cadenas hoteleras que cuentan con establecimientos turísticos en la chiclanera urbanización de Novo Sancti Petri confían en que la temporada media y baja que está a punto de llegar lo haga con buen pie. De momento, sus previsiones de ocupación para lo que queda de septiembre y para el mes de octubre son similares a las del pasado año, y se sitúan en un margen que oscila entre el 45% y el 85% según hoteles, con una media final que rondará el 70%.

«En estos momentos pensamos que podemos cerrar la temporada con unos datos aceptables». Así se aseguraba ayer al menos desde uno de estos alojamientos, el Apartahotel Tartessus, que incluso ha descartado cerrar sus puertas en invierno, lo que sí harán otros de los grandes de la zona.

Es el caso por ejemplo de tres de los hoteles del grupo Hipotels (que sólo mantiene el Barrosa Park operativo), o del grupo Iberostar, que hará lo propio con sus dos instalaciones de cuatro estrellas. También cerrarán, como vienen haciendo en los últimos años, el hotel Aldiana, el Club Hotel Riu o el hotel Valentín. Todos ellos tienen previsto dejar de funcionar (y aprovechar para realizar reformas o redecorar estancias) a mediados del mes de noviembre.

Estos hoteles volverán a su actividad normal en febrero o marzo de 2009, poniendo fin a un paréntesis que también afectará a otros establecimientos de menor tamaño «por cuestiones de rentabilidad económica». Sin embargo, el litoral chiclanero, destino predilecto de media Europa durante los meses más fríos del año, mantendrá al menos 2.500 camas operativas entre los hoteles de lujo como el Hotel Barceló, el hotel Meliá Sancti Petri o el hotel Vincci. Las compañías que los explotan esperan que los congresos y reuniones de empresa traigan los ingresos durante la temporada baja, como ya ocurrió en 2007 con la presentación del nuevo modelo de Porsche, que reunió en Chiclana a más de 3.500 profesionales de la marca.

De cualquier forma, y tras el ligero descenso del 4% en la ocupación media registrada por el sector en agosto (el pasado mes se consiguió un 89,3% y en 2007 hubo un 93,6% de ocupación), Novo Sancti Petri se prepara ya para afrontar los primeros coletazos de una crisis económica internacional que, de momento, no se nota demasiado en este área.

Desde el Ayuntamiento se asegura que «a día de hoy las previsiones que se manejan son muy positivas». El turismo invernal cuenta este año además con el aliciente del programa Conoce Chiclana, que incluye la visita, de un sólo día de duración, de grupos procedentes de localidades cercanas con guía, souvenirs y almuerzo incluídos.

turismo@lavozdigital.es