VARIEDAD. Lola Pavón, de Casa Márquez, posa tras una variada gama de catavinos.
Jerez

El catavino para degustar Jerez

Casa Márquez permite conocer algo más sobre uno de los elementos más representativos de la ciudad

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Poco se ha escrito sobre uno de nuestros elementos que más y mejor representa a Jerez: el catavino. Merecería más atención porque muchos sostienen que no hay mayor delito con nuestros caldos que beberlos en esos vasitos de plástico achatados. El catavino es fundamental para degustar el fino frío, el oloroso potentes o los dulzones Pedro Ximénez.

Para saber algo más sobre esta copa tan identificada con Jerez, pocos lugares hay mejor que Casa Márquez. Más de cincuenta años vendiendo en la calle Consistorio las copas más preciadas. Lo primero que llama la atención es la amplia gama de diseños de catavinos que se presentan en los estantes. Antonio Márquez nos abre su casa para deleitarnos con sus catavinos de cristal brillante. «La verdad es que no hay un catavino que sea el auténtico. Cualquiera puede servirnos. El clásico, más asequible para todos, algunos de Bohemia, el Cristal D´Arques o ahora, por poner un ejemplo, están los Tritán, hechos con un tipo de vidrio muy duro y resistente a las ralladuras», comenta Antonio.

También llaman la atención esos recientes diseños más anchos de boca y altones. Una especie de mezcla entre el catavino clásico y la copa de mesa. Muy apropiados y originales, por distantes a la tradición más puramente jerezana que parezcan. Se trata de un modelo que invita a tomar los vinos de Jerez precisamente en la mesa. «Este tipo de copa se solicita menos; generalmente lo demanda un cliente más selecto, aunque también es más escaso», asegura.

No hay mejor regalo que una selecta copa personalizada con un bonito grabado. «Los catavinos se piden mucho para regalos, generalmente destinados a gente de afuera de Jerez o simplemente para darle más elegancia a una celebración como una boda», comenta Antonio Márquez. Sin duda, el catavino es lo mejor para deleitarse con una buena copa de Jerez. Como suele decirse, variedad hay para todos los gustos.