David y Goliat se dan cita en el Bernabéu con la primera jornada de la 'Champions'

Al Real Madrid se le presenta un inicio de Liga de Campeones idóneo. Recibe en el Bernabéu al Bate Borisov, el conjunto con menor coeficiente UEFA de todos los que participan en la competición (1.760 puntos, por 93.837 del Madrid ). A priori, la diferencia parece insalvable. Inamovible.

Pero si de algo está lleno el fútbol es de ejemplos de superación, de victorias imposibles y derrotas inimaginables. Brasil lo sabe bien tras el Maracanazo que le privó de un Mundial. El propio conjunto merengue sufrió en sus carnes la frustración de perder en su estadio la Copa del Rey el año que celebraba su centenario frente al Deportivo. Por todo ello, la concentración debe ser máxima y la relajación inexistente.

Si algo está claro es que la Champions es el torneo por excelencia del Madrid . Pocos equipos consiguen una motivación mayor para afrontar este tipo de encuentros. Los jugadores, el cuerpo técnico y la directiva saben de la exigencia y predilección de su afición por este título. Más aún tras los fracasos de los últimos años, donde no ha conseguido superar los octavos en la últimas cuatro ediciones.

Sin confianzas

Para evitar sorpresa alguna, el técnico blanco Bernd Schuster alineará un equipo muy ofensivo. «No nos podemos permitir el lujo de tropezar. Tenemos que buscar la forma de ganar. Estos tres puntos hay que conseguirlos de cualquier forma», afirmó el entrenador germano. Confiará en el acierto goleador de Van Nistelrooy y en la buena racha anotadora de Higuaín. El argentino será pieza clave no sólo en este choque sino a lo largo de la temporada, por lo menos hasta que llegue un nuevo refuerzo en ataque. Raúl y Van Nistelrooy con más de 30 años no pueden aguantar solos el peso de tres competiciones. Otros dos holandeses, Robben y Van der Vaart, completarán el poder ofensivo junto a Guti. Las únicas bajas son Pepe y De la Red, ambos por sanción. Sergio Ramos podrá jugar tras superar una pubalgia que le impidió vestirse de corto contra el Numancia. En cualquier caso, el técnico alemán deberá remodelar la defensa que actuó contra el equipo soriano, con Heinze y Cannavaro como centrales. Se caen de la lista de convocados Metzelder y Salgado por decisión técnica.

Existe un precedente reciente de un enfrentamiento entre el Bate y un equipo español. Fue en la primera ronda de la Copa de la UEFA del año pasado contra el Villarreal. El equipo de Castellón se impuso con suma facilidad por 4-1 en El Madrigal y 0-2 en Minsk, dejando en evidencia la debilidad del rival madrileño.

El peligro del Bate proviene de su confianza, de la proeza de un equipo que aunque fue creado en 1973 se refundó en 1996, es decir, en doce años de vida ha conseguido ascender a Primera División, ganar cuatro ligas y una copa y clasificarse para la máxima competición continental. Ganar en el Bernabéu sería un nuevo hito que el Real Madrid está en la obligación de evitar.