Las últimas cintas de Garci, Cuerda y Gracia Querejeta, preseleccionadas para aspirar al Oscar en febrero
Los girasoles ciegos, Siete mesas de billar francés y Sangre de mayo inician la carrera por el Oscar. En vez de designar un único título, la Academia elige tres finalistas, que así pueden publicitarse como «preseleccionadas para el Oscar». El 26 de septiembre se dará a conocer la película más votada. Después queda lo más difícil: que la Academia de Hollywood la escoja entre las decenas de países que aspiran al Oscar de habla no inglesa. Las cinco aspirantes finales se sabrán el 22 de enero; la gala se celebrará, como siempre, el último lunes de febrero.
Actualizado: GuardarLas normas establecen que los filmes deben haberse estrenado entre el 1 de octubre y el 30 de septiembre de 2007. Sangre de mayo, el levantamiento popular de 1808 contra los franceses según Garci, llegará a los cines el 3 de octubre. Un estreno fantasma en una sala perdida ha servido para cumplir el expediente.
El primer director español en ganar el Oscar de habla no inglesa compite con José Luis Cuerda y Gracia Querejeta. Después de 25 años dedicado al cine, Cuerda ha visto por primera vez una película suya seleccionada para el Oscar. Los girasoles ciegos lleva recaudados un digno millón y medio de euros. No es el taquillazo que se esperaba ni ha gustado de-masiado a la crítica, pero su estreno ha resultado oportuno en pleno debate sobre la memoria histórica.
Esta adaptación de una conmovedora novela de Alberto Méndez dibuja una sórdida España de posguerra poblada de perdedores. «Va muy bien en taquilla. Quien diga que estas películas sobre la historia de España son asuntos difíciles miente, la gente las quiere ver», se felicitaba ayer Cuerda que, si sale elegido, irá a Los Ángeles con Maribel Verdú, «que tiene experiencia en estas muchas cosas».
Una mujer en la terna
Gracia Querejeta, por su parte, ve «complicado» ser elegida «entre dos cineastas maduros y consagrados». Siete me-sas de billar francés se estrenó hace un año tras conseguir los premios al mejor guión y actriz (Blanca Portillo) en San Sebastián. Sus protagonistas, mujeres de barrio «que buscan una segunda oportunidad en la vida y se rehacen de sus heridas» entre la pérdida de seres queridos y la ruina económica.