El curso echa a andar con las molestias de las obras y carencias en el transporte
La normalidad en el inicio del nuevo curso en la provincia ha sido mayor que en otras ediciones Sólo tres centros prorrogaron la apertura poque aún no habían terminado las reformas
Actualizado: GuardarPrimera cruz en el calendario escolar. El curso echó ayer a andar con menos incidencias de las que cabía esperar. Con una decenas de colegios en obras y ciertas desavenencias sobre la superación de cupos por aulas y la organización del transporte escolar, era previsible que surgiera algún que otro problema a la entrada de los centros. Pero la tranquilidad acompañó a la primera jornada del año escolar 2008/2009, para satisfacción de profesores, alumnos y del propio delegado provincial del ramo, Manuel Brenes. «Este año se ha trabajado muy duro, desde los profesores a los funcionarios de la Delegación», reconoció el responsable educativo, que acompañó al presidente de la Junta, Manuel Chaves, en la apertura oficinal del curso en Sanlúcar de Barrameda.
En total fueron algo menos de 200.000 los alumnos que iniciaron ayer el curso en toda la provincia. Los mayores llegaron solos y formaron corrillos en la puerta de sus centros con el resto de los compañeros. En el caso de los escolares de Infantil y Primaria eran sus padres los que organizaban las tertulias a la salida.
Cádiz
Ésa fue la imagen de ayer en el Colegio La Inmaculada de Cádiz, donde aprovecharon la reunión improvisada para tratar el problema del transporte escolar. El centro se encuentra a veinte minutos a pie de la última parada de autobús y a poco menos de la de tren, pero la ruta es urbana, por lo que la Junta no está obligada a financiar el transporte escolar. Aún así, tras asumir las competencias lo ha hecho, pero con la salvedad de que los alumnos que ya acudían al colegio en el bus escolar no pierdan ese derecho, que no se extenderá a los que no lo tenían solicitado el año pasado ni a los de nueva matriculación.
Para los padres esta medida es «totalmente discriminatoria», según dijo la presidenta del Ampa, Concha Lobato, que aprovechó las primeras horas del día para tramitar las más de 70 reclamaciones que ya se han presentado. «Nosotros no pedimos que la Junta asumiera el servicio de autobús, que antes se gestionaba desde el Ampa, pero si lo hace que garantice los mismos derechos para todos», recalcó.
San Fernando
La situación no es única, en San Fernando se repite este mismo caso en los colegios de Infantil y Primaria Tofiño y Solís y el IES Wenceslao. Todos eran competencia del Ministerio de Educación y Ciencia por tratarse de centros militares, pero este curso han pasado a manos de la Junta, que ha aplicado el mismo criterio, por lo que se repite la problemática.
El inicio del curso en San Fernando ha estado marcado también por el retraso en diferentes actuaciones como es el caso del Colegio de Camposoto o el derribo del Isla de León. De hecho, los alumnos de este último centro no comenzaron las clases ayer debido a las obras que se están acometiendo para la ampliación de la instalación y presumiblemente se incorporarán a clase el próximo jueves.
La demora en la actuación del colegio de Camposoto ha provocado que el Constitución acoja un nuevo módulo prefabricado para integrar a los nuevos alumnos de tres años, a la espera de que el nuevo emplazamiento abra en enero, momento en el que los alumnos serán trasladados a este centro en el caso de que se cumplan los plazos de ejecución. En cuanto a las molestias que puedan ocasionar las obras del tranvía para dejar y recoger los alumnos, no será hasta los próximos días cuando se compruebe en qué medida pueden afectar, puesto que la entrada y salida de los escolares fue ayer escalonada.
Chiclana
El nuevo CEIP de Coto la Campa, ubicado en la playa, fue protagonista justo por lo contrario. El colegio está a expensas de los últimos trabajos, pero ya ayer recibió a los primeros grupos de niños de tres años, hoy hará lo propio con los de cuatro. Éste fue el hecho más destacado del inicio del curso escolar 2008-2009 en Chiclana, puesto que el colegio aún sin nombre definitivo, según el delegado municipal de Educación, Agustín Díaz, «ha iniciado las clases con total normalidad». Cabe reseñar que el servicio de comedor no estará disponible en varias semanas. Por lo demás, y según comentaron fuentes municipales, el resto de centros educativos de Chiclana inició el curso «con total normalidad y sin incidencias reseñables».
El Puerto
A pesar de todos los frentes abiertos, las miras estaban puestas en el nuevo colegio portuense de Costa Oeste. Después de semanas de incertidumbre, los alumnos de Infantil pisaron ayer sus aulas. Los padres han protagonizado meses de protestas ante la tardanza de las obras y en todo momento mostraron su rechazo a que el centro «abriera con deficiencias por las prisas». Pero finalmente los alumnos entraron en el centro aunque con cierto recelo, porque las obras continúan.
Por el momento sólo están disponibles seis aulas de Educación Infantil y tres de Primaria, así como las dependencias administrativas del centro. Los miembros del Ampa se mostraron muy en desacuerdo con el patio de albero, ya que consideran que es muy sucio y que perjudica a los niños con alergias. A pesar de ello, los escolares inauguraron el centro con sus mochilas relucientes y algún que otro llanto.
Puerto Real
La nota de color en Puerto Real la puso una estructura metálica que Renfe ha instalado en el Colegio Reggio, por la que más de 200 niños no pudieron acceder a su clase. Este sorporte, del que ni el centro ni el Ayuntamiento tenían conocimiento, está anclado por varios sitios al muro del colegio, lo que puede poner en peligro la estabilidad del aula. El director del Reggio, Francisco Muñoz, manifestó a este periódico que «la estructura supone una gran peligrosidad para los niños, ya que no tiene ningún tipo de protección» Hasta que se solucione el problema y la entrada esté perfectamente acondicionada, los pequeños accederán al colegio por la puerta destinada a los alumnos de Primaria y Secundaria. El responsable trasladó sus críticas a la Delegación y exigió que se le informe de la idoneidad de esa estructura.
Jerez y La Sierra
La ciudad jerezana fue una de las que más incidencias registró en el primer día, también fue la que más centros estrena este curso. Entre ellos, el Federico Mayo, que porrogó la apertura de varias clases para terminar los trabajos de acondicionamiento. El de La Barca tampoco abrió sus puertas por la suciedad tras la obra. Una de las principales reivindicaciones de las ampas jerezanas fue el incumplimiento de la ratio de alumnos en una veintena de aulas. Durante este curso convivirán hasta 27 escolares en una misma clase, lo que excede el número aconsejado por la Consjería de Educación.
En la Sierra no se registraron incidencias fuera de lo programado. La principal queja fue el inicio de las clases de los alumnos de Infantil del San Juan de Ribera de Bornos en aulas prefabricadas.
Campo de Gibraltar
La normalidad fue la tónica en el la zona sur de la provincia. Entre las incidencias, un centro de San Roque protagonizó la jornada. Se trata del IES Taraguilla, donde la directora, apoyada por los padres exigió a la Delegación un informe de seguridad de las obras para entrar al edificio.
Información realizada por Elena Martos, Carlos Cherbuy, Cristina Lojo, Tito Barrena y Antonio Romero.