Deportes

Suspenso en remate a puerta

El Xerez acabó pagando su falta de puntería y cayó derrotado ante un Salamanca que no fue mejor Salva Sevilla demostró mucha más efectividad que Antoñito, Mario Bermejo o Pedro Ríos

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El fútbol es un deporte en el que no siempre gana el mejor, en el que la justicia a veces brilla por su ausencia y el que los malos también tienen finales felices. Ayer le tocó al Xerez sufrirlo y no se pudo traer ningún punto del Helmántico pese a ser superior que su rival. Y es que el Salamanca se impuso en el marcador, posiblemente en la posesión, pero ni mucho menos en las ocasiones y el dominio del encuentro. El propio entrenador unionista reconoció que se les había aparecido la Virgen, pues el Deportivo gozó de claras ocasiones que no ejecutó.

La derrota le deja con seis puntos y con la sensación de que jugando como lo hizo, sobre todo al comienzo de la segunda parte, se mantendrá la categoría sin demasiados problemas.

Esteban Vigo optó por una solución intermedia para resolver el problema que le generaban las bajas de Antonio Calle y Jesús Mendoza. La intención inicial del malagueño era trastocar las líneas lo menos posible, pero finalmente retrasó la posición de Francis a la defensa. El técnico del Deportivo desechó la opción de Portela, un lateral nato, e introdujo en el equipo a Silva. El jugador que llega del Málaga se emparejó en el círculo central con Viqueira, pero el tándem no ofreció las mismas garantías que el formado por Francis y Viqueira durante las dos primeras jornadas. Y es que Silva, de características totalmente distintas a las del barbateño, no abarca tanto terreno ni tiene la velocidad de la que hace gala Francis. El 7 del Xerez regresó ayer al lateral derecho. Y es que para no meter a Portela en el equipo, Esteban prefirió cambiar la posición de otros dos jugadores, ya que Redondo corrió y defendió en esta ocasión por la izquierda.

En la delantero no hubo ningún tipo de sorpresa. Antoñito estaba recuperado y jugó de titular junto a Mario Bermejo, que tapaba el hueco dejado por Calle. El cántabro jugaba como hombre más adelantado y el sevillano se descolgaba por detrás entre las líneas. Precisamente fue él quien disfrutó de la primera clara ocasión de romper la igualdad. Un saque de esquina desde la izquierda fue peinado en el punto de penalti y rematado por Antoñito. El sevillano recibió en el segundo palo y su derechazo salió fuertemente despedido tras chocar contra el palo.

Puntería

El ochenta por ciento de la primera mitad se disputó en terreno de juego xerecista. Los charros se imponían en la posesión de balón y lo intentaban especialmente por la banda derecha, pero el dominio del Salamanca no se traducía en aproximaciones con riesgo a la portería que defendía Chema. De hecho, el primer disparo entre los tres palos de los locales fue el gol. Antes lo había intentado Salva Sevilla con un fuerte disparo que acabó en la grada y con un par de centros con peligro, pero el gol llegó con una triangulación por el centro de la defensa. El joven medio centro se asoció con Cohen, quien le devolvió la pared, para que Sevilla superara por alto a Chema.

La alegría en la grada del Helmántico duró poco, pues sólo cuatro minutos después de celebrar el tanto abroncaba a un portero que contribuyó de manera importante a que el Deportivo igualara antes del descanso. Alberto no fue capaz de blocar un centro de Pedro Ríos y Antoñito, que ratoneaba por el área chica, la empujó casi sin ángulo al fondo de la portería.

Alberto saltó al campo tras el descanso pidiendo perdón y la afición le recibió entre pitos y aplausos, algo que no le afectó demasiado pues a los diez minutos de reanudarse el juego impidió que Mario Bermejo lograra el segundo tanto xerecista. Además, el portero del conjunto charro tuvo bastante trabajo, pues los atacantes azulinos sacaron a relucir su calidad y su precisión. Una de las más evidentes ocasiones de marcar la tuvo Bermejo que disparó casi desde la frontal del área chica, pero Alberto respondió con una rápida acción de reflejos. Antoñito también tuvo un par de ellas, pero el sevillano, extrañamente, falló en la definición dentro del área.

Durante los primeros veinte minutos de la segunda parte los azulinos se quitaron el dominio del Salamanca y trasladaron el partido al área defendida por los charros. En ese momento el rival estaba totalmente entregado y esperando que se consumara la remontada xerecista, pero las ocasiones se fallaron y tras ese arrollador inicio, tras las fallidas ocasiones, el Salamanca sacó fuerzas para empujar de nuevo al Xerez a su campo y frenar el grifo del peligro azulino.

Sólo una gota, sólo un jugadón de Pedro Ríos estuvo a punto de poner por delante al conjunto jerezano, pero Perico hizo lo más complicado -marcharse de tres adversario- y falló cuando todo parecía hecho, pues en el mano a mano con Alberto, el xerecista no logró disparar entre los tres palos.

Todo lo contrario en el bando contrario, que de una falta escorada logró marcar. Salva Sevilla sorprendió a Chema metiendo mucha rosca a su lanzamiento en lugar de buscar el centro a uno de sus compañeros.

sgalvan@lavozdigital.es