ESPAÑA

El rastreo se usó el 11-M y en el seguimiento al comando Vizcaya

La 'triangulación', el sistema que permite saber la localización exacta de un terminal gracias a la ubicación de las tres antenas que le dan cobertura, ya ha sido utilizado con éxito por las fuerzas de seguridad en investigaciones sobre ETA o Al-Qaida.

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Cuartel de Calahorra. La Guardia Civil siguió los pasos al cabecilla del comando Vizcaya Arkaitz Goikoetxea, detenido el pasado julio, tras el atentado a la casa cuartel de esta localidad riojana gracias a la llamada que hizo a las 13.28 horas del 21 de marzo para avisar que media hora después un coche bomba iba a estallar en las proximidades de la instalación del instituto armado. Goikoetxea hizo la llamada a través de un teléfono móvil, con tarjeta prepago anónima. Sin embargo, el sistema de triangulación desveló que el terrorista telefoneó cuando se encontraban a la altura de la localidad alavesa de Maeztu, a 77 kilómetros de Calahorra, y a más de una hora de trayecto mientras se dirigía a un lugar desconocido del País Vasco por la N-132 para refugiarse.



Explosivos del 11-M. Las llamadas de 'El Chino' el 28 de febrero de 2004 en su viaje a recoger la 'goma dos' a Asturias fueron clave para esclarecer el transporte de explosivos y el papel del ex minero Suárez Trashorras. Los repetidores telefónicos revelaron que el cabecilla yihadista y sus acólitos pasaron por Las Rozas (Madrid), por Sanchidrián (Ávila), por Cimanes del Tejar (León) y por Molleda (Asturias).

Casa de Chinchón. El seguimiento de las 30 tarjetas vendidas al locutorio de Jamal Zougam, el primer detenido por la masacre de Madrid, permitió saber que siete de las tarjetas de los teléfonos móviles usados como temporizadores en la masacre habían sido activados un día antes de la matanza junto al repetidor de la localidad madrileña de Morata de Tajuña. Las 'triangulaciones' llevaron el 22 de marzo al refugio terrorista de Chinchón dos días después de que lo hubiesen abandonado los islamistas. En esa subvivienda se prepararon todos los artefactos usados en los ataques a los trenes de cercanías.



Aparato de acogida. El aparato de acogida de ETA en Francia que estuvo operativo entre 1999 y 2002 en Burdeos, Lyon y Toulouse cayó gracias a la 'triangulación' de los móviles que supuestamente usaban los responsables del complejo. Quince colaboradores y miembros etarras fueron detenidos y toda la red de pisos clandestinosfue descubierta gracias a las indiscretas llamadas de los terroristas que gestionaban los escondites para los huidos.