
Industria congela el precio de la bombona de butano hasta fin de año
El Ministerio asegura que la medida es para "proteger a los consumidores"
MADRID Actualizado: GuardarEl Ministerio de Industria, Turismo y Comercio ha decidido congelar el precio de la bombona de butano para proteger a los consumidores, por lo que no se revisará hasta el próximo enero, ha informado el departamento que encabeza Miguel Sebastián.
Por tanto, el precio de la bombona no se modificará el próximo 1 de octubre, fecha en la que debía ser actualizado según la normativa vigente, que establece revisiones trimestrales (en enero, abril, julio y octubre). Si se hubiera aplicado la fórmula automática de revisión trimestral, la bombona habría subido el 9,01% el 1 de octubre y su precio habría pasado de los 13,76 euros actuales a 15 euros.
La congelación del precio no afectará a la retribución de los distribuidores, puesto que se refiere tan solo al coste de la materia prima y de los fletes (gastos de transporte), y no al de comercialización.
Según Industria, la "protección de los consumidores" es la razón que ha motivado la decisión de congelar el precio de la bombona. El Ministerio considera que la evolución de las cotizaciones de la materia prima entre junio y agosto (meses de referencia para la revisión del 1 de octubre) ha sido resultado "de movimientos especulativos". Por ello, y dada la actual moderación del precio del crudo, al que está ligada la cotización del gas, Industria ha decidido mantener de forma transitoria el precio de la bombona hasta la próxima revisión de enero.
Las operadores creen que podría generar un conflicto social
El director general de la Asociación de Operadores de Gases Licuados del Petróleo (AOGLP), José Luis Blanco, cree que la congelación del precio de la bombona de butano hasta enero podría generar un conflicto social en un sector en retroceso, cuyas ventas descienden a un ritmo del 6 por ciento anual.
Blanco ha explicado que detrás de la producción, envasado y distribución del gas butano hay muchos trabajadores demandando subidas salariales que no pueden ser satisfechas por unos empresarios que difícilmente cubren esos gastos con los 13,76 euros que vale una bombona.
Más allá de la protección al consumidor, Blanco ve una clara intencionalidad política detrás de la decisión del Ministerio de Industria de cancelar la revisión trimestral del precio de la bombona, ya que el butano está incluido en la cesta del precios sobre la que se calcula el IPC.
"¿Por qué el Gobierno no congela el precio del pan, de la leche o de las gasolinas?", se pregunta el responsable de esta patronal, que entiende que si el Gobierno quiere implantar un "precio social" para el butano debería hacerlo con fondos públicos, en lugar de recortar el margen de los operadores, que ya es "muy ajustado".