El año que volvimos a las ventas
Se acabó el buscar en internet los vuelos baratos, pese al favor que nos hizo Vueling al justificar su nomenclatura respecto al aeropuerto de Jerez-Cádiz, en aquella memorable rueda de prensa donde su responsable afirmó que «hay quien no sabe donde está Jerez». Se acabó la reserva del hotel urbano tirando del correspondiente talonario y el escaquearse de los niños y la parienta durante todo un fin de semana. La temporada 2008-2009 será recordada, parafraseando una famosa película, como «el año que volvimos a las ventas». Nos espera la provincia, Marbella, Antequera o Écija, o lo que es lo mismo, Domingos de excursión con los amigos, cervecitas, huevos fritos con patatas, gin tonic a los postres y carretera y manta con otros tres puntos a eso de las 7 de la tarde. Para los mas viajeros, siempre quedará la opción de coger el barco a Ceuta, e incluso, algún audaz volará a Melilla en el famoso focker que tanto teme mi amigo Teo Vargas.
Actualizado:Hay que verlo desde el lado positivo e ir dando carpetazo a los errores de la temporada pasada, al igual que han hecho los Brigadas Amarillas en un impecable aunque tardío comunicado, con examen de conciencia incluido. A poco que los resultados acompañen y la ilusión nos contagie, podemos presenciar una treintena de partidos de nuestros ídolos, pues las distancias permiten el desplazamiento dominguero en un 70% de las salidas del Cádiz. ¿En calidad de favoritos? Por supuesto, faltaría mas, aunque sudando la camiseta desde el minuto uno. Pero el Cádiz es el Madrid o el Barcelona de Segunda B y su obligación no es otra que quedar el primero del grupo para así aprovechar las ventajas del nuevo sistema de ascenso. Y como dice el genial chirigotero Yuyu en uno de sus recientes artículos, a esperar que se nos de mejor el curso que el recurso. 11.500 personas así lo esperan en Cádiz.