IMPLICADA. Toñi Vicente, acompañada por sus abogados, llegó ayer por la mañana al Juzgado número 3 de Ferrol. / EFE
ESPAÑA

La cocinera Toñi Vicente, en libertad sin cargos por el caso de las vieiras tóxicas

La Guardia Civil detiene a otros dos restauradores, a seis mariscadores y a un distribuidor de alimentos

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La prestigiosa cocinera Antonia Rodríguez Vicente, titular del restaurante Toñi Vicente, quedó ayer en libertad con cargos tras declarar ante el Juzgado número 3 de Ferrol como imputada en un delito contra la salud pública junto a otros dos propietarios de restaurantes de Galicia, varios mariscadores furtivos y un empresario distribuidor de productos del mar. Todos ellos fueron detenidos por la Guardia Civil en relación con la compraventa de vieiras procedentes de la ría de Ferrol y portadoras de la toxina ASP, conocida como toxina amnésica, cuyo consumo continuado produce pérdida de memoria. La ría de Ferrol lleva diez años cerrada a la extracción de vieiras y con la prohibición de comercializar vieiras gallegas.

La operación se inició tras la intervención del teléfono del hijo del empresario Juan Queiro, propietario de la distribuidora Comercial Xanquei, detenido como presunto principal responsable de la distribución de las vieiras tóxicas, que también fue puesto ayer en libertad con cargos. Además, fueron arrestados seis mariscadores furtivos de la comarca ferrolana y otros dos conocidos restauradores de Sanxenxo y Poio (Pontevedra).

Todos los imputados prestaron declaración ayer y aunque el sumario ha sido declarado secreto, el abogado de Toñi Vicente afirmó que el procedimiento demostrará la inocencia de su defendida. Según el letrado, el papel de la restauradora «es totalmente circunstancial, sin que tenga nada que ver con la trama». Por su parte, Toñi Vicente declaró: «Espero salir reforzada y que mi reputación esté por encima de este malentendido».

Control sanitario

El control sanitario suele ser efectuado por laboratorios contratados por los restaurantes, que analizan permanentemente la contaminación y controlan los alimentos cocidos y los congelados. Por su parte, la Consellería de Sanidad de la Xunta cuenta con 300 inspectores que supervisan dichos controles y emiten los correspondientes registros sanitarios. Además, la Consellería se encarga de realizar semanalmente análisis de las condiciones ambientales que puedan afectar a los moluscos. Al respecto, la Consellería de Pesca recordó que la vigilancia se mantiene activa para evitar la extracción de moluscos presumiblemente afectados por la toxina, con incautaciones como los 1.500 kilos decomisados en Santiago el pasado mes de julio durante su transporte.

En la operación llevada a cabo por la Guardia Civil se incautó alrededor de 4.000 kilos de vieiras almacenadas en una nave del polígono industrial de O Tambre, en Santiago.