El X Congreso de la Fundación Caballero Bonald será «una reflexión arriesgada»

Faltan exactamente un mes y 24 días para que los Museos de la Atalaya se llenen, un año más, de literatura. Será el próximo 29 de octubre cuando la Fundación Caballero Bonald alumbre un nuevo congreso que reunirá en Jerez, como viene siendo habitual en la última década, a los creadores y estudiosos más reconocidos del mundo de las letras. Las sílabas del futuro. Una meditación sobre la literatura del siglo XXI es el título dado a una programación en la que prima la juventud y la apuesta por los nuevos valores. «Será un ejercicio realmente peligroso porque ¿cómo se puede pronosticar algo tan dudoso, tan insostenible como el futuro de la literatura?», se preguntó ayer el titular de la fundación, José Manuel Caballero Bonald. «Puede resultar hasta cierto punto petulante, pero es necesario», aseguró el escritor jerezano que no quiso perderse la presentación de la gran cita literaria del año en la ciudad.

Andrés Neuman, Elena Medel, Eva Díaz Pérez, Juan Carlos Abril, Mercedes Castro, Isaac Rosa o Yolanda Castaño son algunos de los nombres que copan la agenda de esta nueva edición del congreso, como siempre, condensada e intensa. «He estado atento a lo que se publicaba últimamente y aquí están muchos de los nombres que yo sugerí, como el de Elena Medel», aseguró Caballero Bonald que quiso otorgarle la paternidad de la criatura -el congreso- al poeta Luis García Montero. Los que estarán presentes en Jerez los próximos 29, 30 y 31 de octubre «dan una cuenta bastante exhaustiva de lo que es la literatura española de hoy», continuó.

Los jóvenes creadores compartirán mesa y pensamientos con reconocidos estudiosos de la literatura actual como José Carlos Mainer, Antonio Ventura o el propio Luis García Montero, que combina su faceta de poeta y ensayista con la de profesor universitario. El programa de 2008 incluye nuevas fórmulas como los talleres literarios y las conversaciones, además de las habituales mesas de debate y conferencias: «Tratamos una cuestión que hay que debatir y que hablar -apostilló el escritor jerezano- que es algo que yo defiendo en esto y en cualquier ámbito de la política. Es el único camino posible».

El autor de Ágata ojo de gato ofreció ayer una pincelada de sus pensamientos sobre el estado y la proyección de la literatura contemporánea: «Tengo mis dudas. Hay una literatura que avisa de una posible exploración y hay otra que va a remolque de lo que ya se hizo en el siglo XIX», comentó el jerezano. «A mí me interesa la avanzada, la indagación -continuó- aunque no sé si vendrá un nuevo Cervantes, un Góngora o un Shakespeare».

Complejidad

La organización de un congreso de estas características supone un arduo trabajo para el equipo de la Fundación Caballero Bonald al completo, incluido su titular. «Él es el mejor relaciones públicas y el mejor coordinador para esta tarea», declaró la delegada de Cultura y Fiestas del Ayuntamiento de Jerez, María Dolores Barroso, a lo que el escritor jerezano quiso restar importancia: «Me han atribuido méritos que no son míos -dijo con buen humor-. En realidad, soy un incompetente».

Por su parte, la alcaldesa de la ciudad, Pilar Sánchez, -que siempre está presente en las grandes citas de la institución jerezana- destacó que «Jerez se convierte en esos días en el centro del debate literario. Es una referencia obligada para los amantes de la literatura y de la cultura con mayúsculas». La apuesta por el futuro de esta nueva edición del congreso literario es importante porque, según Sánchez, «nos interesa conocer las motivaciones de los nuevos creadores y descifrar sus perspectivas». Este décimo congreso de la Fundación Caballero Bonald cuenta con el patrocinio de la Junta de Andalucía, el Ministerio de Cultura, la Diputación Provincial, Cajasol y González Byass, además de la colaboración de otras entidades como la Universidad de Cádiz.

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