La provincia acumula 1.300 objeciones a la asignatura de Educación para la Ciudadanía

El empeño que pone la Junta de Andalucía para que la asignatura de Educación para la Ciudadanía se imparta a todos los alumnos de Secundaria de la comunidad es el mismo que pone un colectivo formado ya por 1.300 familias gaditanas que se niegan a que sus hijos la reciban. Su crecimiento les ha obligado a organizarse. En un principio -hace algo más de un año-, se creó en Jerez la Asociación Laicos Asidonia para defender los intereses de los padres que se mostraban contrarios a que esta materia se impartiera en centros del sistema educativo público. Unos meses después se creó una segunda en San Fernando, Padres Objetores Isleños. Recientemente, a lo largo de este verano que ya se acaba, han empezado a funcionar otras dos; una en El Puerto -Plataforma Julio Gómez Pastrana Familias Objetoras de El Puerto- y una cuarta en la capital -Cádiz Educa en Libertad-.

El presidente de la decana de estas cuatro entidades, Ignacio Martínez, explicó que, desde la perspectiva de la asociación, esta asignatura no respeta la neutralidad ideológica en la educación y que sus contenidos suponen una intromisión en el derecho que garantiza la Constitución a los padres a elegir la educación moral que esté de acuerdo con sus convicciones. Martínez defiende que se eduque a los alumnos en los valores constitucionales y medioambientales, entre otros, «pero en esta asignatura se incide más en cuestiones morales y políticas que en la enseñanza de los valores democráticos», señaló. Para evitar suspicacias añadió: «Si gobernara el PP y creara una asignatura para instruir en valores religiosos en el sistema público, también estaría en contra de esta materia».

Tribunales

Casi un centenar de estas familias ha puesto el caso en manos del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Entienden que se han vulnerado sus derechos fundamentales con la negativa de la Junta a reconocerles su derecho a acogerse a la objeción de conciencia para que sus hijos no reciban esta asignatura. A 28 de ellos ya se les ha concedido como medida cautelar la exención de la obligatoriedad de acudir a las clases de esta asignatura y de la evaluación. Otras 70 familias gaditanas están a la espera de que el alto tribunal andaluz les comunique las mismas medidas. En El Puerto ya hay dos sentencias firmes favorables a la postura de los padres.

Por lo pronto, el resto de afectados han decidido llevar sus casos a los tribunales en cuanto sus hijos reciban un nuevo suspenso en la asignatura en la convocatoria de septiembre. «Esto es la imposición de una moral colectiva, que es exactamente lo mismo que se hacía en el franquismo con la asignatura de Formación del Espíritu Nacional», sentenció Martínez.

El Puerto y Jerez aglutinan, con unos 700 casos, más de la mitad de los casos de objeción de la provincia a esta asignatura; la capital por su parte cuenta con en torno a una veintena. Los centros con un mayor número de alumnos que no acuden a estas clases son el Colegio Perpetuo Socorro en Jerez, el Javier de Uriarte y Grazalema en El Puerto, y el Fernando Camuñas en San Fernando; en Cádiz están repartidos en varios centros.

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